Este artículo se centra en el problema de la vivienda, un derecho fundamental, y afirmo sin temor a equivocarme, que se trata del principal problema de nuestro municipio, el cual se ha visto agravado por la inacción, falta de visión e insensibilidad social de nuestros gestores municipales. Con su inoperancia, han provocando entre otros problemas, un incremento brutal del precio de las viviendas tanto en compra como en alquiler, lo que ha supuesto la expulsión de más de 13.000 jóvenes de Getxo, imposibilitados para iniciar su proyecto de vida en el pueblo que los vio nacer y un envejecimiento brutal de nuestro municipio. Las herramientas con que contamos para intentar revertir esta tendencia son la planificación urbanística y la voluntad política de llevarla adelante. Analicemos en qué situación se encuentra:
El PGOU, Plan General de Ordenación Urbana actual, documento legal que rige la planificación de nuestro pueblo, informa de la necesidad, tipología jurídica y de construcción, espacios físicos donde se enclavará la vivienda, dotación de servicios generales, movilidad, sostenibilidad medioambiental, etc. data de 2001, su vigencia debió finalizar en 2009, a fecha de hoy sigue prorrogado, ¡12 años sin renovar!, vez y media más de la vigencia aprobada.
En 2013 el ayuntamiento dio inicio a la revisión del PGOU, en cumplimiento de lo dispuesto en la Ley de Suelo de la CAV se constituyó un Lantalde de participación ciudadana que englobaba a aproximadamente 36 asociaciones y entidades ciudadanas y a otros tantos ciudadanos-as particulares que durante los años 2013, 2014 y 2015 estudiaron y debatieron sobre como es nuestro pueblo y cómo queríamos que fuese. Debate enriquecedor, sin cortapisas, con visiones diversas y con acceso a toda la documentación urbanística de Getxo. Pues bien, después de tres años de trabajo y esfuerzo intenso (no olvidar que estamos hablando de ciudadanos-as que dedicaron mucho de su tiempo de ocio a este fin), dicho Lantalde fue capaz de consensuar una propuesta muy mayoritaria sobre las necesidades de nuestro municipio y sobre los criterios a seguir para implementar la misma en la redacción del nuevo PGOU, todo ello con la máxima transparencia, tanto es así, que la mayoría absoluta de dicho Lantalde instó al gobierno municipal a consultar a la ciudadanía, entendiendo que dada la importante afección que sobre el presente y futuro de nuestro pueblo tiene este asunto, era necesario recabar su opinión, más allá de las exposiciones públicas sobre las propuestas acordadas antes de la aprobación del mismo, tal y como por otro lado se recoge tanto en la Ley de Suelo de la CAV como en el decreto municipal de creación del citado Lantalde de participación ciudadana a propuesta de EH Bildu y PSE. Pues bien, han pasado 6 años y seguimos donde lo dejamos.
¿Qué ocurre con nuestros-as regidoras municipales?, ¿Tan incapaces son?, ¿Tan negligentes? Si entendemos la gestión municipal como el conjunto de acciones que aunando todos los medios, intelectuales, materiales y legales conduce a satisfacer y/o facilitar, con transparencia, las necesidades de todo tipo que la ciudadanía democráticamente pueda demandar, y pasamos por el tamiz de esta definición la gestión municipal de Getxo, irremediablemente, hasta el más forofo defensor de PNV-PSE, tendrá que concluir que la gestión de nuestro pueblo es un despropósito.
Estamos en tiempos difíciles y me temo que largos, siendo más necesario que nunca priorizar los recursos, de todo tipo, contar con la ciudadanía más allá de solicitar su voto cada 4 años, poner los cuidados en el centro de la acción política dando soluciones eficaces y ágiles a los problemas de nuestro municipio, con transparencia y perspectiva de futuro.
Leer en ehbildu.eus
