Oskar Matute: “Este es el tiempo de la paz, de la democracia real y participativa, y de que los ayuntamientos hagan efectiva la palabra que el pueblo ha deposidato en las urnas, para lo cual sobran las armas.
El portavoz de Alternatiba, Oskar Matute, ha aplaudido la decisión de los gobiernos municipales de Andoain y Lasarte-Oria de impedir el acceso a los escoltas a las sedes consistoriales: “Se trata de unamedida acertada, acorde con el nuevo escenario político, y con la superación de situaciones de excepcionalidad, en un momento donde se impone el respeto a todos los derechos de todas las personas y las armas deben desaparecer para siempre”.
Desde la formación de izquierdas subrayan que “este es el tiempo de la paz, de la democracia real y participativa, y de que los ayuntamientos hagan efectiva la palabra que el pueblo ha deposidato en las urnas, para lo cual sobran las armas”. “Debemos ser capaces de avanzar en la desmilitarización de nuestra sociedadde forma progresiva para dar paso a una sociedad normalizada, democráticay dialogante”. Cabe destacar, así mismo, que la decisión parte de representantes de una coalición, Bildu, en la que todas las personas que han concurrido en sus listas han firmado y asumido un decálogo en defensa de la paz y los derechos humanos, sociales y políticos.
El portavoz de Alternatiba ha recordado que actualmente existe un alto el fuego por parte de ETA, que debemos conseguir se transforme en definitivoy que, por encima de todo, “es la propia sociedad vasca la que rechaza todo tipo de violencia y vulneraciones, y la que apoya a quienes apuestan por superar el conflicto, como demuestran los resultados electorales del 22M, donde todas las opciones políticas que han concurrido a las mismasrechazan cualquier tipo de violenciapara la consecución de objetivos políticos”.
Respecto a las críticas vertidas desde Madrid y Gasteiz por los responsables de interior de ambas instituciones, Matute ha recordado que el propio Rubalcaba ha defendido esta semana la decisión policial de reducir el número de escoltas asegurando que “el riesgo es menor”. Ante esto, “es absurdo decir que dejar a los escoltas en la puerta de los ayuntamientos entrañe un riesgo para nadie y aceptar que la anormalidad que ha supuesto la violencia, como la elevada presencia de escoltas, se convierta en una realidad inmutable”.