Después de las dos Huelgas generales del 8 de marzo en las que se vieron fortalecidos y legitimados tanto el movimiento feminista como sus reivindicaciones, la lucha feminista ha logrado poner en el centro los cuidados, así como el rol reproductivo invisibilizado que siempre han desempeñado las mujeres.
A partir de las V Jornadas Feministas del pasado noviembre en Durango, el movimiento feminista ha seguido consolidando una agenda propia impulsada y acompañada por las mujeres de toda Euskal Herria. Y en ese empeño, desde Alternatiba este 8M es una buena ocasión para refrendar nuestro compromiso.
Un compromiso que nos ha de llevar a reflexionar cómo generar cambios estructurales que nos permitan superar el sistema patriarcal que nos atenaza y así alcanzar la oportunidad de vivir vidas que merezcan la pena ser vividas a todas las mujeres y disidentes de género.
Proponemos comenzar con esto:
- Vamos a fomentar la sororidad entre nosotras.
- Vamos a luchar contra el racismo y la xenofobia, la extrema derecha, la misoginia, la lesbofobia y la homofobia, así como contra la mercantilización de nuestros cuerpos, luchando también por los derechos sexuales y reproductivos.
- Vamos a impulsar un movimiento mundial para sacar el Capital del centro de nuestras vidas y sustituirlo por los cuidados.
- Vamos a responder a todos los ataques sexistas y a los feminicidios. Porque cuando nos tocan a una, nos tocan a todas.
- Vamos a confrontar con todos los intentos de retroceso de derechos sociales, políticos y medioambientales. ¡No pasarán!
Antolatu indarrak, batu borroka feministara!
