La compañera de Alternatiba y juntera de EH Bildu Araba, ha registrado una moción en las Juntas Generales instando a la Diputación a que ejerza el control de aquellas residencias y viviendas comunitarias de gestión privada que presenten una elevada prevalencia de contagios de COVID-19.
Venceslao ha justificado esta moción argumentando que la “Diputación debe controlar los protocolos y los planes de actualización para que la entrada del virus en estos centros disminuya lo más posible” y ha señalado que durante la segunda ola se están dando focos importantes en las residencias y viviendas comunitarias privadas mientras la Diputación ejerce de mera espectadora. Mientras tanto, la CAV es una de las pocas comunidades autónomas que no ha intervenido los centros residenciales, aun teniendo escenarios gravísimos dentro de estos centros.
Venceslao ha denunciado que en la primera ola no se produjeron intervenciones dejando a las residencias sin apenas apoyos y que en esta segunda ola tampoco hay intención de intervenir estos centros.
Además, la mayoría de sus plantillas de trabajadoras se han contagiado. “Con la información que se nos ha facilitado desde Diputación hemos comprobado cómo una vez más las inspecciones no funcionan como deberían en el actual contexto de pandemia: las inspecciones siguen siendo previamente programadas y escasas. La Diputación no controla lo que está pasando dentro de las residencias porque su actual modelo de inspección no servía antes de la pandemia y desde luego no sirve en la actualidad”.
Por último, Venceslao ha señalado que rechazar la puesta en marcha de esta moción además de inexplicable supondría poner en riesgo la salud de las personas mayores que residen en este tipo de centros.
