La Coordinadora Nacional de Alternatiba se ha reunido para establecer sus prioridades y retos de cara al nuevo curso político.
Desde Alternatiba, consideramos que nos esperan tiempos marcados por un combate entre la defensa de derechos para la mayoría y el blindaje de privilegios para las élites. Por eso, la izquierda, también aquí en Euskal Herria, ha de ser capaz de construir un bloque social de progreso que sirva de muro ante la ola de autoritarismo que propugnan las derechas, moderadas o extremas.
Nuestra acción política parte de una premisa muy básica: no aceptamos que lo habitual sea asumido como normal o natural. Así, las desigualdades sociales o las injusticias no pueden aceptarse sin más. Como reza el lema del colectivo de jóvenes precarizados de Bilbao, “NO es lo que hay”, y por eso nuestro plan de trabajo pretende superar o, al menos, ensanchar, los marcos de lo posible, sin renuncias.
Y lo planteamos así en un contexto de crisis, un tiempo en el que, desde luego, hay riesgos; pero también oportunidades. Ante la tentación de quienes tienen como objetivo volver a la normalidad anterior a la pandemia, ahora nos toca, más que nunca: Debatir, pelear y movilizar.
Una de las premisas con las que nació Alternatiba, era la de hacer frente a todos los sistemas de dominación sin priorizar una lucha frente a otra. Sin renunciar a esta idea, no podemos obviar que nos acercamos a un punto de no retorno que convierte al cambio climático en una de las mayores urgencias, no solo para la ciudadanía vasca sino para el conjunto de quienes habitamos el planeta. La transición energética es, por tanto, una prioridad que, además, puede y debe ser palanca de cambio de transformaciones más profundas.
En esta materia, es necesario un cambio radical de las políticas públicas. Quedan 9 años para reducir un 55% las emisiones de gases de efecto invernadero respecto a 1990, y nuestros datos son poco menos que catastróficos. Mientras la Unión Europea ha reducido sus emisiones un 30%, en la Comunidad Autónoma Vasca, en cambio, en tres décadas solo han bajado un 11%, y desde que Urkullu es lehendakari, solo el 1%, prácticamente nada. Frente a la propaganda, estos son los datos.
Debemos transformar y actualizar nuestro modelo productivo, poniendo siempre la vida en el centro. Porque, aunque nos cueste aceptarlo, nuestra sociedad no necesita que salgan cada vez más coches de las fábricas, sin embargo, sí que necesita más cuidados dignos, en muy diferentes capas de la población, y esto es algo que la pandemia ha dejado en evidencia. No podemos mirar hacia otro lado.
Hemos visto la sangría que ha dejado el virus en unas residencias que gobiernos irresponsables han dejado en manos privadas, y ayer mismo desayunamos con los casi dos mil tumores que Osakidetza no ha detectado por la paralización de los cribados. Son dos ejemplos, entre miles, de lo que una sociedad que aspira a dignificar la vida y dotarse de servicios dignos no puede normalizar.
Hay debates y medidas que por fin empiezan a asomarse a las agendas políticas, pero no podemos permitir que se queden en declaraciones de intenciones. El reparto del trabajo (que no solo del empleo), la jornada laboral de 4 días, la subida del salario mínimo en parámetros acordes a Hego Euskal Herria, la defensa de las pensiones públicas… Sin olvidar que no podemos reactivar la economía a costa de la precariedad de las y los trabajadores. Muchas de estas medidas serán fruto de debate en nuestras campañas y jornadas que pretendemos proyectar tanto hacia la calle como en nuestra participación en Euskal Herria Bildu.
Y desde luego, no podemos obviar nuestra acción política sin hacer mención a los debates de calado que abordamos en la confluencia de soberanistas de izquierdas que junto con otras fuerzas políticas pusimos en marcha hace ya diez años. Mañana mismo, en Donostia, EH Bildu celebra su Conferencia Política, con dos hitos que abordar como son el Plan Feminista y la propuesta para un nuevo pacto educativo.
Desde nuestro convencimiento de que el feminismo es la propuesta emancipadora más trascendental de nuestro tiempo, en Alternatiba no podemos más que felicitarnos porque EH Bildu vaya a aprobar mañana su Plan feminista, que le permitirá seguir profundizando en su recorrido feminista. Es fundamental que las organizaciones políticas se despatriarcalicen y que la mirada feminista sea parte de todas sus propuestas. Por eso, esperamos que la militancia de EH Bildu, entre la que nos encontramos, apoye masivamente el Plan Feminista.
En la Coordinadora de Alternatiba también hemos coincidido en señalar la relevancia de la apertura del debate en torno al modelo educativo vasco. Nadie duda de que un sistema adoptado hace décadas, para una sociedad sociológica, económica y demográficamente muy diferente requiera de una actualización. Nuestra apuesta, y será la línea en la que como bilkides aportaremos al debate en el seno de EH Bildu, es la de una escuela pública vasca, de toda la ciudadanía y al servicio del conjunto de la sociedad, no supeditada a intereses privados, con recursos suficientes y que no permita segregación ni discriminación de ningún tipo. Tal y como hemos hecho desde que creamos la casa común de EH Bildu, pondremos todo nuestro esfuerzo y compromiso militante para aportar nuestras ideas a esta propuesta que se presenta mañana.
Hemos terminado la reunión reafirmando el papel fundamental de Alternatiba para seguir ampliando esa hegemonía soberanista de izquierdas articulada en torno a EH Bildu, un movimiento político que las élites de este país temen porque la crisis del COVID-19 no solo ha revelado los límites del modelo socioeconómico, sino también los modelos clientelares de gobernanza, privilegios para los de siempre e inercias arraigadas durante largos años.
Desde Alternatiba, volcaremos nuestros esfuerzos en construir una red social, política y popular que, en clave de mayoría, detenga cualquier intento de las fuerzas reaccionarias por degradar a la clase trabajadora vasca. Debemos ser capaces ante las amenazas que asoman en nuestras vidas de sumar sectores, luchas y gentes para que, esta vez, el “no pasaran” se cumpla.