El portavoz nacional de Alternatiba Oskar Matute ha calificado la decisión de la Audiencia Nacional de excluir a Otegi, Elkoro, Garmendia y Kortazar del caso ‘Herriko tabernak’ como “claramente insuficiente, ya que, más allá de alegrarnos por las personas que han sido liberadas del proceso, este sigue siendo un juicio político destinado a perseguir derechos fundamentales como el de asociación y libertad de expresión de personas cuyo único delito es hacer política”.
Matute ha señalado que “estos juicios son tics autoritarios de un modelo democrático que se encuentra en proceso de descomposición y que mediante el abuso de la ley, pretende imponer una visión de estado que cercena los derechos de miles de personas, y que también criminaliza a una gran parte de la sociedad vasca”. A su vez, ha calificado el sistema político actual como “un muro que pretende evitar la consecución de nuevos pasos en el proceso de paz y de nuevas soluciones democráticas que tanto ansían los y las ciudadanas de Euskal Herria”.
El portavoz de la formación de izquierdas ha subrayado que “esta decisión, no puede hacernos olvidar el retraso administrativo que sufre la justicia española, y tampoco les va a permitir tapar las carencias democráticas y la más que dudosa separación de poderes del estado español, en el que juicios como éste son utilizados como cortina de humo para invisibilizar los problemas de primer orden como la corrupción, la sumisión a los mercados o la propia debilidad democrática”.
Por todo lo anterior, desde Alternatiba han denunciado “el ocultismo que ejerce el gobierno central a través de estos juicios anacrónicos y absurdos desde su propio origen” así como “el papel que juegan los tribunales buscando nuevos cabezas de turco obedeciendo a dictados políticos”. Y es por ello, que han exigido “el fin de todos estos procesos políticos y el decaimiento de los mismos, quedando todos los imputados libres de semejante ataque a la libertad”.