Intervención de nuestra compañera y parlamentaria de EH Bildu Diana Urrea, en la rueda de prensa en la que la coalición ha valorado el gran avance en el proceso de paz en Colombia tras el trascendental acuerdo de justicia alcanzado por el Gobierno y las FARC
Euskalduna eta kolonbiarra izanik, bi herrialdeetako bake prozesuak oso garrantzitsuak dira niretzat. Horregatik, prentsaurreko hau oso berezia eta zirraragarria da niretzat
Colombia está viviendo en estos momentos un acontecimiento histórico. Tras 3 años de proceso de diálogo y arduas negociaciones en La Habana, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos y el máximo jefe de las FARC-EP, Timoleón Jiménez (Alias Timochenko) han acordado el punto referido a Justicia Transicional, creando una Jurisdicción Especial para la Paz, que permitirá acabar con la impunidad, obtener verdad, contribuir a la reparación de todas las víctimas, juzgando e imponiendo sanciones a los responsables de los delitos cometidos durante el conflicto armado, garantizando de ese modo, la no repetición.
Además de ello, acuerdan la transformación de las FARC-EP en un movimiento político legal, que contará con todo el apoyo del Gobierno colombiano, así como el fin del proceso de negociación en un periodo máximo de 6 meses.
Ese acuerdo ha quedado inmortalizado con una foto que pasará a la historia. Jamás imaginaríamos ver a Santos y a Timochenko darse la mano con Raúl Castro como anfitrión.
Este acontecimiento constituye la garantía del éxito del camino emprendido que se torna irreversible a pesar de la presión de los enemigos de la paz. En este sentido, yo como vasco- colombiana, quiero expresar mi alegría e ilusión, pero sobre todo, mis felicitaciones al pueblo colombiano y en especial, a las miles y miles de familias que como la mía, salieron de Colombia buscando un futuro mejor y que están siendo testigos aunque sea desde la distancia del fin del conflicto armado, de ese primer paso hacia una verdadera paz con justicia social.
En peores condiciones, con más de 200.000 muertes y 5 millones de personas desplazadas por el conflicto, el gobierno colombiano y las FARC-EP han sido capaces de sentarse en una mesa para negociar y acordar una memoria en la que no haya vencedores ni vencidos, en la que sus únicos beneficiarios, sean los hombres y mujeres de Colombia que con verraquera han luchado décadas por una paz que sea la paz de las clases populares, haciendo camino al andar aunque sea un camino largo y culebrero. Si han podido en Colombia, ¿cómo no va a ser posible en Euskal Herria?
Santos y Timochenko en sus discursos expresaron la voluntad de que este proceso de paz, sirva de espejo para tratar otros procesos de paz en el mundo. Tomen nota Gobiernos francés y español!
Queremos expresar el deseo de que el ELN se pueda incorporar cuanto antes al proceso de negociación. También esperamos que se materialice lo antes posible el acuerdo sobre el cese al fuego bilateral porque no se puede seguir negociando en medio del conflicto.
Borondate politikoa izanik, akordioetara heltzea eta bakea lortzea posible dela erakutsi dute FARCek eta Kolonbiako gobernuak.
Bakea lortzea posible dela erakusten digute, nahiz eta kontrako interes asko egon.
Zoragarria litzateke Kolonbian bizitzen ari diren momentu historiko hau, guk ere Euskal Herrian etorkizun hurbil batean bizi ahal izatea eta seguru nago lortuko dugula.