La escalada de agresiones sexuales tuvo una lectura más crítica en los partidos de la oposición de Bilbao. Alba Fatuarte (compañera de Alternatiba y concejala de Euskal Herria Bildu) exigió la puesta en marcha de «políticas efectivas de igualdad» y un mayor compromiso político.
La concejala denunció el «escaso presupuesto» destinado a ese fin –el 0,3% de las cuentas anuales, que superan los 500 millones–. «No vale echarse las manos a la cabeza cuando sucede una agresión y no asumir nuestra responsabilidad como institución», señaló Fatuarte, que reclamó medidas para combatir la precariedad laboral de las trabajadoras municipales.
ElCorreo 04/08/17 pag. 4