El portavoz de Alternatiba, Oskar Matute, ha lamentado hoy la “enésima piedra” que la Audiencia Nacional ha puesto hoy en el camino hacia la paz y a la normalización política de Euskal Herria al condenar a Arnaldo Otegi, Rafa Diez y el resto de imputados en el caso Bateragune. Igualmente, ha calificado de “sinsentido” atribuir pertenencia a banda armada a un grupo de personas que pretendían construir una apuesta política para la superación de un conflicto.
Alternatiba denuncia una sentencia “injusta y cruel”, que deja en “evidencia la nula justicia de lo que nos quieren vender como un estado de derecho”, una condena que “cercena la libertad de participación política, censura la libre expresión de ideas y vulnera el derecho de reunión”. Matute ha recordado que, a lo largo del proceso, el propio Otegi ha reiterado y clarificado la “apuesta por las vías exclusivamente políticas” de la izquierda abertzale, determinación ante la cual la Audiencia Nacional, con un juicio de carácter político, “ha optado por dilapidar las esperanzas de miles y miles de hombres y mujeres que ansían la resolución del conflicto que desde Madrid se empeñan en perpetuar”.
El portavoz de Alternatiba ha subrayado que otra de las instancias del sistema judicial español, el fiscal general del estado, “anticipándose quizá a la llegada a la Moncloa de un inquilino aún más totalitario”, también ha salido a la palestra para pedir al Tribunal Constitucional que no permita la legalización de Sortu de cara al 20N, lo cual demuestra una vez más “hasta que punto Madrid vive de espaldas al nuevo tiempo político y social emprendido por la inmensa mayoría de la ciudadanía vasca, que demanda la paz, la restitución plena de todos los derechos para todas las personas y el respeto a la libre decisión democrática expresada por el pueblo vasco”.
Matute se ha reafirmado en el buen camino emprendido a lo largo de este año, “capaz de romper una dinámica de vulneración sistemática de derechos” y ha llamado, en nombre de Alternatiba, a participar en todos los actos y expresiones de solidaridad con los condenados que puedan convocarse en los próximos días.