El proceso de fusión de las tres cajas de la CAPV ha generado un intenso debate en el seno de Alternatiba. Así, por un lado, en la discusión no se ha podido obviar el contexto de ofensiva capitalista ultraliberal en el que nos hayamos inmersos, que se plasma, en el oscuro y antidemocrático entramado de las cajas y del sistema financiero del Reino de España, en una muy desigual correlación de fuerzas entre los adalides del sistema y los que queremos avanzar hacia una Euskal Herria emancipada. Por otro lado, también hemos tenido en consideración que éste era un proceso opaco, en marcha, muy avanzado – garantizada a todos los efectos ya la fusión de Vital y BBK – e irreal en la representatividad en territorio guipuzcoano.
Ante este contexto, ante esta correlación de fuerzas, Alternatiba ha entendido que BILDU tenía que jugar bien sus cartas para poner diques de contención a los procesos en ciernes de destrucción de la Obra Social y de privatización inmediata del sistema financiero público vasco. En este sentido, Alternatiba ha apoyado el acuerdo, ya que se han introducido medidas que dificultan la entrada de capital privado, así como la venta de la propiedad pública. Estos diques de contención no han existido en ningún otro proceso similar dentro de esta ola de bancarización de las Cajas de Ahorro.
No obstante, la lucha continúa. El acuerdo, como ya hemos dicho, define trincheras que dificultan la privatización, pero aún queda un largo camino por delante. Confiamos en que en los escenarios futuros la presencia de la izquierda soberanista y alternativa altere radicalmente la correlación de fuerzas, cerrando así de manera taxativa la vía de la privatización, y redefiniendo las finanzas públicas hacia un modelo democrático, transparente, con una delimitada función social centrada en criterios ecológicos y contra el cambio climático, en la creación de empleo de calidad, en la defensa de la economía del cuidado, de la soberanía alimentaria, etc.
Sostenemos así que la necesaria decisión de las asambleas de las tres cajas para la entrada de capital privado -a expensas de lo establecido por el Banco de España u otro órgano competente-, o el compromiso de no transmitir los activos a terceros salvo en causas muy específicas, establece un campo de juego diferente, en el que habrá que moverse con toda la determinación del mundo para avanzar en nuestros postulados, en la defensa de una banca pública y social, y en defensa de un Marco Vasco de Relaciones Laborales. La lucha continúa.
Ana Etxarte y Oskar Matute
Portavoces nacionales de Alternatiba