Recogemos las palabras de Juana Aranguren (Plazandreok). Le hemos preguntado sobre el posicionamiento político e ideológico desde el cual están abordando la violencia contra las mujeres; sobre cuáles considera que son las estrategias de actuación prioritarias; y cuáles identifica como cuestiones a trabajar en un futuro inmediato. Queremos agradece la riqueza de sus respuestas y la disposición que ha mostrado ante nuestra llamada. Para llegar a entender de qué estamos hablando cuando hablamos de violencia contras las mujeres resulta imprescindible conocer las reflexiones y propuestas del movimiento feminista, de aquí y de allá, y aprender de sus diversas prácticas y experiencias.
1. Los medios de comunicación y la sociedad en general, maneja conceptos e ideas muchas veces confusas de lo que es y supone la violencia contra las mujeres. Por eso en esta primera pregunta nos gustaría conocer ¿qué entendéis como violencia contra las mujeres? ¿desde qué posicionamiento político e ideológico estáis abordando esta cuestión?
Los medios de comunicación tratan las agresiones a las mujeres de una manera que desde mi punto de vista no anima a salir de estas situaciones a las mujeres que reciben la información ni disuade a los agresores.
Tampoco hablan de las causas de la violencia, nunca la vinculan a la discriminación de las mujeres ni a la lucha por la igualdad entre los sexos.
En el caso de los asesinatos de mujeres nunca nos hablan de las víctimas, sólo las enumeran, otra más para el recuento anual. Se desprende de la información que suelen dar, que el agresor era un hombre de lo más normal incluso agradable y que nadie en el vecindario se explica su acción, por lo que habría que “pensar en una arrebato” o quizá “en una provocación de la víctima”.
Para nosotras o para mí (me da igual hablar como Juana Aranguren o como Plazandreok), la violencia es la expresión más brutal de la desigualdad entre mujeres y hombres, y una herramienta fundamental para mantener una sociedad patriarcal basada en la supremacía de los hombres sobre las mujeres.
2. Siguiendo con la estrategias puestas en marcha para enfrentar la violencia contra las mujeres, ¿cuáles identificáis como prioritarias desde vuestro ámbito de actuación?
Además de ser necesario el desarrollo de las actuales leyes, tanto de violencia como de igualdad, que están muy lejos de completar su aplicación, sería necesario una mayor voluntad política por impulsar las políticas de igualdad y los organismos de igualdad.
Justo lo contrario de la actual tendencia: eliminación del Ministerio de Igualdad en el Estado y ninguneo de Emakunde en nuestra Comunidad.
Eso en el terreno institucional, por otro lado sería importante que el Movimiento Feminista retomara el protagonismo en la lucha contra la violencia, protagonismo que ha perdido en parte, al ser asumido por las instituciones parte del discurso e implementadas muchas medidas reclamadas por el MF.
3. Y por último, sobre los retos y lo que demandáis a partidos políticos y otras organizaciones sociales, ¿cuáles creéis que son las cuestiones más prioritarias a trabajar en este próximo año?
Como cuestiones prioritarias creo que habría que amparar más a las víctimas para que pudieran dar el paso de denunciar, no sólo animarles a denunciar, convirtiendo la denuncia en un objetivo, en vez de considerarlo un primer paso, que es lo que es, realmente.
Y amparar a las víctimas no es ponerles escoltas, aunque esto puede ser necesario en algún caso, sino acompañarles a lo largo del proceso, cubrir sus necesidades de todo tipo, para lo que tiene que cambiar el concepto de piso de acogida-garage por casas de acogida donde puedan llevar a cabo el trabajo necesario para poder salir de su situación, con otras mujeres que hayan salido de esas situaciones, con feministas que les hablen de las causas etc.
Además se tendrían que impulsar e implementar las políticas contra la discriminación.
Que todas las políticas incorporen esa lucha contra la discriminación (la llamada perspectiva de género), lo que está muy lejos de la voluntad de nuestra clase política.