La portavoz de Alternatiba, Ana Etxarte, se ha sumado hoy a las críticas vertidas desde el movimiento feminista y el propio personal técnico de Lakua contra el anteproyecto de ley contra la violencia machista que “el departamento de Ares se empeña en tramitar a pesar del rechazo generalizado que ha suscitado dentro y fuera del Gobierno Vasco”. Etxarte ha tildado de “innecesaria” una nueva norma y ha abogado por un desarrollo reglamentario de la ley actual, tal y como han solicitado en sus alegaciones las organizaciones de mujeres y feministas: “Se trata de una ley que no responde más que al afán protagonista de Interior que, no conforme con su papel en la atención a las víctimas de la violencia machista, ahora pretende hacerlas políticamente rentables”.
Desde Alternatiba han tachado de “lamentable error” la intención de convertir la violencia contra las mujeres en un asunto de seguridad pública cuya solución pasa exclusivamente por la vía policial. Etxarte ha recordado que la violencia machista es la “expresión más brutal, pero no la única” de la desigualdad entre hombres y mujeres, “por lo que desvincularla de la discriminación y la explotación de las mujeres supone un grave retroceso, un agravio a todas aquellas personas que han luchado durante años para situar las políticas de igualdad en el centralidad que Interior pretende usurpar”.
Etxarte ha finalizado exigiendo a la Dirección de Atención a las Víctimas de la Violencia de Género – dependiente de Interior- que retire su anteproyecto y, asimismo, ha pedido al Gobierno Vasco que dote de recursos las políticas destinadas a identificar las causas y los síntomas de la violencia machista, y al desarrollo e implementación de políticas de igualdad, “lo cual difícilmente puede fomentarse desde una actuación exclusivamente policial”.