EH Bildu ha rechazado participar en la comisión de gastos reservados reunida esta mañana en el Parlamento y solicitará la supresión de ese órgano porque, tal y como explica Oskar Matute, «la opacidad está en la base misma de su existencia y, por consiguiente, no es más que un instrumento para evitar el control público sobre la gestión que el Departamento de Seguridad hace del dinero del conjunto de la ciudadanía». El parlamentario de EH Bildu reivindica la necesidad de transparencia plena y subraya que «en un sistema democrático, si lo es de verdad, no hay sitio para acciones de gobierno secretas y fuera del control de la sociedad a la que sirve ese gobierno».
En esta línea, Matute rechaza la existencia misma de los fondos reservados y apunta además que «la historia enseña que esos fondos públicos se han utilizado más de una vez para financiar acciones antidemocráticas y contrarias a los derechos humanos; nosotros no vamos a avalar nidos de víboras como esos». Y añade: «es imprescindible garantizar también en Seguridad la transparencia y el control público, y eso es incompatible con el concepto de gastos reservados; por eso vamos a pedir un cambio radical de esa comisión, porque queremos garantizar su transparencia».
Hoy ha vuelto a quedar en evidencia que el nuevo modelo policial anunciado por la consejera Beltrán de Heredia no era más que un titular periodístico, ya que en el fondo nada ha cambiado y su modelo es el de siempre, el de la opacidad. Prueba de ello es que hoy el PNV, con el apoyo de PSE y PP, otra vez han obstaculizado los esfuerzos de EH Bildu por aclarar las circunstancias que rodearon la muerte de Iñigo Cabacas. PNV, PSE y PP han ratificado su veto político y se han negado a tramitar las comparecencias de la consejera de Seguridad y del jefe de la Ertzaintza, Jorge Aldekoa, ambas solicitadas por Julen Arzuaga.
El parlamentario de EH Bildu subraya que «depurar las responsabilidades políticas del ‘caso Cabacas’ es tarea del Parlamento, entre otras cosas porque ese es el compromiso que todos los grupos políticos asumimos con la familia». Por ello, tras recordar que hay muchos datos por aclarar, critica las «excusas baratas» esgrimidas por PNV, PSE y PP y considera «inaudito y obsceno que se nieguen a escuchar las explicaciones de la consejera y del jefe de la Ertzaintza, que nunca ha comparecido hasta la fecha en el Parlamento para aclarar su papel en este caso, y que dinamiten cualquier intento de control sobre la actuación de la Ertzaintza en la fecha en que se produjo la muerte de Iñigo Cabacas».