Ante la financiación municipal, un año más, de diversas actividades de carácter religioso, así como la campaña de difusión de éstas por parte del Ayuntamiento, el grupo municipal EHBildu ha vuelto a insistir en la necesidad de separar la administración pública y las diferentes confesiones religiosas. La coalición soberanista de izquierdas ha reivindicado el laicismo como único marco que garantiza la convivencia de personas que tienen creencias y valores diferentes.
En palabras de la compañera de Alternatiba y concejala de EHBildu Bilbo, Ana Etxarte, “esta separación y el carácter laico que deben tener las instituciones públicas no se cumple en Bilbo”. Según Etxarte, “si se respetara la libertad de conciencia como derecho fundamental, el ayuntamiento no hubiera publicado unos folletos en los que, entre las actividades culturales programadas para los próximos días festivos, se incluyen, como reclamo, las procesiones católicas”.
Etxarte ha subrayado que “el Ayuntamiento de Bilbo, como institución que representa a todas las personas que vivimos en la villa, no puede transmitir la idea, tal y como lo hace en las guías que se ha publicado, que las procesiones son parte de nuestro patrimonio y personalidad, ya que cada vez somos más las personas no nos sentimos identificadas con la religión católica”.
De esta manera, EHBildu, que ya en la discusión presupuestaria pidió la retirada de este tipo de partidas – cuestión que fue rechazada con los votos de PNV y PP – , vuelve a insistir en la no financiación con dinero público de cualquier acto que tenga carácter religioso.