Asier Vega, miembro de Alternatiba y juntero bizkaitarra de EHBildu, ha comparecido esta mñana en rueda de prensa para dnunciar que la incineradora de Zabalgarbi genera residuos altamente tóxicos y que su bajo rendimiento energético pone en peligro el cumplimiento de la normativa europea.
EH Bildu ha exigido que se aclaren varios aspectos relacionados con la actividad de la planta incineradora de Zabalgarbi. En la comisión de Medio Ambiente celebrada hoy en las Juntas Generales de Bizkaia. La coalición ha preguntado al diputado Iosu Madariaga, a su vez presidente de Zabalgarbi, sobre informaciones que han salido a la luz a raíz de un informe elaborado por profesores expertos de la UPV y la asociación Ekologistak Martxan.
El juntero de EH Bildu Asier Vega se ha referido a tres cuestiones: emisiones a la atmósfera vertidas durante el proceso de incineración, gestión de los residuos peligrosos que se generan tras la incineración y eficiencia energética y viabilidad económica de la planta de Zabalgarbi.
Emisiones a la atmósfera
En lo que a la emisiones a la atmósfera se refiere, Lakua admitió que se superaron hasta en cuatro ocasiones los valores límite de contaminantes atmosféricos que se produjeron en 2012. El representante de EH Bildu ha destacado que si bien en una de las ocasiones el Gobierno Vasco ordenó parar la actividad de la planta, no ocurrió lo mismo en las otras tres ocasiones.
Además, Vega ha recordado que según la Autorización Ambiental Integral, “no se podrán superar en ningún caso los límites de monóxido de carbono y Zabalgarbi supero los límites de monóxido de carbono a la atmosfera en dos ocasiones, sin que la planta se haya parado en ninguno de los casos”.
EH Bildu ha alertado de la emisión de substancias altamente contaminantes. El dato de emisión de mercurio durante el año 2012 fue de 1.5 kg. Vega ha solicitado al diputado que aclare si se ha superado el límite de emisión en continuo de 150 mg/m3 de este metal.
Por otro lado, los datos que se recogen en las estaciones de medición durante la campaña de medición de Dioxinas y Furanos del 2012 en los puntos cercanos a la planta de Zabalgarbi, demuestran que se ha superado el valor guía (que es de 23 femtogramos/m3) en cuatro de las doce mediciones que se realizan. “¿Es o no es nociva para la salud la emisión de dioxinas y furanos a la atmosfera? Compartirán conmigo que las dioxinas y los furanos son las sustancias más tóxicas generadas por la actividad humana” ha añadido Vega.
EH Bildu ha asegurado que existen diversos estudios a nivel mundial, que certifican que la incineración de residuos genera peligrosidad y que producen sustancias tóxicas nocivas para la salud de las personas. Vega ha citado el estudio publicado en el año 2012 por expertos de la Universidad Carlos III de Madrid que afirma que residir cerca de incineradoras y plantas de tratamiento de residuos peligrosos aumenta el riesgo de cáncer por encima de la media.
Residuos
EH Bildu destaca que Zabalgarbi transforma en residuos peligrosos, residuos que no lo son, mediante el proceso de incineración.
Varias muestras de escorias recogidas durante el año 2012 y 2013, no cumplen con los requisitos del ensayo de lixiviación para ser depositadas en un vertedero de residuos no peligrosos. Los análisis demuestran que las escorias han superado los valores de cobre y de carbono orgánico disuelto y, por tanto, deben ser tratadas como residuos peligrosos. “Sin embargo, al parecer, han ido a parar a vertederos de residuos no peligrosos como el de Larrabetzu, Zalla y Lemoa”.
Vega ha pedido explicaciones a la Diputación por la ausencia de control y las posibles consecuencias negativas en la salud de las personas y en el medio ambiente.
Eficiencia energética
El informe de Ekologistak Martxan también indica que Zabalgarbi debería considerarse una instalación de eliminación de residuos y no una planta de valorización energética. Para justificar esa afirmación, el informe hace referencia al factor R1 (índice para medir la eficiencia energética) y su cálculo.
Según los cálculos de Zabalgarbi, el valor del factor R1 en 2012 fue de 0,63. Sin embargo, Ekologistak Martxan señala que ha encontrado errores metodológicos y que el valor del factor R1 fue de 0,59. De ser así, Zabalgarbi pasaría a considerarse una planta de eliminación de residuos y no una planta de valorización energética, ya que el límite se encuentra en 0,60. El Gobierno Vasco ha revisado el cálculo del factor R1 y lo ha fijado en 0,61. Eso sí, sin explicar cómo ha obtenido dicho resultado.
“Que Zabalgarbi obtenga un resultado del factor R1 por debajo de 0,60 supondría que no se podrían incinerar en Zabalgarbi residuos urbanos en bruto, algo que se hace hoy en día. Y además la incineradora tendría la misma prioridad que el depósito en vertedero en la jerarquía de residuos” ha aclarado Vega. El cambio supondría incumplir la normativa europea de residuos.
Por último Vega se ha referido a la dependencia económica de Zabalgarbi con respecto a las ayudas estatales. “Sin las primas que recibe del gobierno español, Zabalgarbi tendría un déficit de 18 millones de euros”. Vega considera que ante la posible eliminación de las ayudas, el encarecimiento del gas y el cambio de normativa europea, la viabilidad de Zabalgarbi queda en entredicho.