Una consecuencia del nuevo contrato político y social «Todos los derechos para toda la ciudadanía vasca» que proponemos, es que las fuerzas políticas que se autoreclaman a favor del Derecho a decidir formen gobiernos municipales, forales y autonómicos comprometidos en la construcción libre y democrática del futuro de Euskal Herria.
Queremos el derecho a decidir, porque queremos decidirlo todo. Y todo lo queremos decidir aquí, en Euskal Herria. No solo queremos decidir para poder vivir como ciudadanos y ciudadanas de nuestro País. Queremos el derecho a decidir para elegir cómo queremos vivir, para que nadie decida por nosotras políticas de desigualdad social. Queremos el derecho a decidir para acabar con el sometimiento de la mayoría a costa de los privilegios de unos pocos. Queremos el derecho a decidir para elegir y construir justicia social para todos y, sobre todo, para todas.
Está en nuestras manos que instituciones que fueron diseñadas al servicio de la dominación del Estado puedan ser puestas al servicio de la insubordinación democrática. Frente al «imperio de la ley» la legitimidad democrática que da la voluntad popular. Sí, dado el carácter autoritario de los Estados español y francés, y su reiterada negativa a habilitar cauces democráticos, apostamos por una vía unilateral y desobediente hacia la independencia.
El desarrollo del marco jurídico-político de la Comunidad Autónoma solo puede ser determinado por la decisión democráticamente expresada por la ciudadanía de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa sin aceptar ni vetos, ni techos competenciales impuestos por el ordenamiento jurídico español.