Oskar Matute – Alternatiba
El régimen español está atravesado por la corrupción de abajo a arriba como se desprende de la declaración ante el juez del cerebro de la trama Gurtel.
¿Qué queremos decir cuando hablamos de corrupción sistémica? Pues muy sencillo.Hablamos de un régimen que tiene instalado hasta el tuétano una práctica del poder público donde éste funciona como fuente de enriquecimiento para unos pocos, generalmente al frente de grandes empresas para las que todas las legislaciones resultan a su favor.
Ese hecho motiva una «colaboración público privada» que no hace sino trasvasar dinero público, de todos y todas, a manos privadas con el fin de que sigan manteniendo su expolio de recursos y con la recompensa de las «puertas giratorias» para los políticos serviles o directamente de las mordidas en forma de porcentaje. Hoy Francisco Correa ha verbalizado poniendo nombres y apellidos (OHL, DRAGADOS Y ACS, ha dicho) a algunas de las grandes empresas del estado que supuestamente participan de esta práctica ilegal.
Resulta de todo punto intolerable, además de mezquino y nauseabundo que haya quienes desde sus atalayadas del poder sigan amansando fortunas a cambio de cemento en forma de obra pública para su propio beneficio, mientras la gente pasa hambre y exclusión social. Ellos deciden quién debe mandar y qué debe hacer durante su mandato.
Eso es la corrupción sistémica, y ante ella, no cabe mirar hacia otro lado. Solo cabe la exigencia de explicaciones, la depuración de responsabilidades y el restablecimiento de todo lo expoliado. Eso es lo que exigiremos desde EHBildu desde ya mismo. Porque a los vascos y vascas también nos han robado!