El pueblo catalán continúa con el procés constituent

Toni Ramos – Alternatiba

Tensión, nerviosismo, incertidumbre… Esto es lo que se vivió recientemente por la situación política de Catalunya. Mientras la CUP-CC había estado debatiendo durante meses, presentando alternativas y tomando decisiones democráticamente, JPS se mantenía en su única e irreversible propuesta de presentar a Artur Mas como candidato a President de la Generalitat. Todo el mundo daba por hecho que se iba a llegar a unas elecciones en marzo, pero a última hora, en el último minuto, casi sobre la bocina, el President en funciones lanzó un triple echándose a un lado y dando paso a Carles Puigdemont, alcalde de Girona y presidente de la Associació de Municipis per la Idependencia, como candidato a la presidencia.

Una maniobra digna de los mejores estrategas. Artur Mas, que se las ingenió para subirse al carro de la independencia en el momento en que se evidenciaba la caída libre de CiU, ahora se aparta para vender su artimaña como un sacrificio por su país, algo que seguramente le reconocerán sus compañeros y compañeras de JPS, sus votantes y los medios de comunicación afines.

El acuerdo al que han llegado JPS y la CUP-CC es del todo injusto y desproporcionado, un precio demasiado alto a pagar por la formación anticapitalista por el mero hecho de que Mas no sea President. Pero hay que tener en cuenta que en toda negociación hay tiras y aflojas y en los resultados también pueden aparecer cosas buenas, en este caso muy buenas:

La primera y más evidente es la desaparición de una imagen vinculada al neoliberalismo más rancio, a la Troika, a la carencia de democracia, a la demagogia, a la corrupción, etc. El narcisismo de Artur Mas se queda fuera, o al menos en segundo plano, en un proceso constituyente que lo último que necesita es una figura de referencia, porque nace de la sociedad catalana y es esta sociedad la que debe liderarlo. Queda meridianamente claro, después de comprobar que se sigue caminando hacia la independencia tras la retirada de Mas, que ni el Procés es Artur Mas ni Artur Mas es el Procés. El Procés Constituent continúa a pesar de todo, a pesar de Mas.

El acuerdo garantiza a su vez el cumplimento de la hoja de ruta que se aprobó en la resolución del 9N, tanto en lo concerniente a los 9 puntos de la declaración independentista como en lo relativo a los 9 puntos del anexo. Es importante recordar que estos últimos puntos hacen referencia a un plan de choque de emergencia social destinado a proteger derechos fundamentales para las y los catalanes (educación, sanidad, pobreza energética, derecho al aborto, etc.).

Por otro lado, la CUP-CC incorporará a dos parlamentarios a la disciplina del grupo de JPS para garantizar el cumplimiento de los acuerdos y hacer de enlace coordinador entre ambas formaciones, pero en ningún caso dejarán de formar parte del grupo de CUP-CC, con lo que continuarán con la fuerza de 10 parlamentarias y parlamentarios. Con esto, la formación anticapitalista se asegura la lucha en el Parlament por el independentismo, el anticapitalismo y el feminismo, y, tal y como aseguró Anna Gabriel en su discurso de investidura, “por la solidaridad, el internacionalismo y la movilización social”.

El seguro que representan las 10 parlamentarias de la CUP-CC en la institución para continuar con la lucha por los derechos sociales y la soberanía de las y los catalanes, precisa necesariamente de la movilización popular. Extrayendo las palabras de Diego Garrido (militante de En Lluita y la CUP) en su artículo “Cap als pressupostos sobirans i socials sense Mas”, el papel de la CUP-CC en la calle debe ser el de “continuar reforzando las luchas y ampliando la base social del independentismo por la izquierda”. Porque la independencia no es el objetivo en sí mismo, sino una herramienta más que necesaria para la conquista de todo aquello que el Reino de España niega a la sociedad catalana sistemáticamente. En este sentido, las luchas sociales son la base para la creación de una alternativa real hacia una república justa, democrática y soberana.

El Porcés Constituent continuará, y lo hará por el empuje de la sociedad catalana.

CUP-CC: Lección de coherencia, responsabilidad y credibilidad

Toni Ramos – Alternatiba

Tras la decisión de la CUP-CC de no colaborar en que Artur Mas sea President, la formación independentista y anticapitalista ha recibido duras críticas por haber preferido ir a las elecciones en marzo en lugar de investirle y así desencallar el Procés. Pero no es la CUP-CC quien va a obligar a unas nuevas elecciones, sino la obstinación de CDC en que sea Mas el President de la Generalitat. No nos engañemos, Mas y CDC no son garantía de independencia, y mucho menos de democracia y soberanía para el pueblo catalán, sólo garantizan beneficios para la burguesía, perjuicio para la clase trabajadora, recortes, privatizaciones y corrupción.

Independencia: CDC contribuyó en la redacción de la Constitución Española y la defendió a ultranza durante casi 40 años, años en los que CiU participó y/o facilitó el gobierno a presidentes como Felipe González y Jose María Aznar. Además, cabe recordar la reunión traicionera de Mas con Zapatero para amputar un Estatut aprobado por la mayoría del Parlament y refrendado por las y los catalanes.

Corrupción: La coalición de derechas también se ha visto envuelta en casos de corrupción tales como el “Caso Pujol”, el “Caso CARIC”, el “Caso Adigsa”, el “Caso Innova”, el caso del Palau de la Música y FERROVIAL, y otros muchos, algunos de ellos con sentencias condenatorias y otros pendientes de sentencia.

Recortes: En los últimos años de Artur Mas al frente de la Generalitat, su gobierno ha reducido presupuestos para gastos sociales y ha puesto en marcha planes de privatización de sectores estratégicos. Y lo ha hecho de tal forma que no hay ni un solo gobierno en Europa que haya recortado tanto en tan poco tiempo.

Pero llega un momento en que en Catalunya emerge el hartazgo de una gran masa social que reclama democracia y derechos, y que ve como única solución la secesión del Principat con respecto al Reino de España. El creciente sentimiento independentista se plasma en la manifestación del 11 de septiembre de 2012, cuando se inundan las calles de Barcelona reclamando independencia y pidiendo que se abra un proceso constituyente que culmine en una república catalana.

Entonces Artur Mas y CDC pasan de defender con uñas y dientes la Constitución a convertirse en abanderados del independentismo, aunque siempre dejando la puerta abierta a la negociación con Madrid. Este giro no se da en su fe cristiana por el neoliberalismo o en la apuesta por los recortes y las privatizaciones, sino exclusivamente en su visión de la relación entre Catalunya y España. Y no fue la voz del pueblo catalán lo que le hizo cambiar, sino más bien la pérdida de poder. CiU preveía una debacle y Artur Mas necesitaba agarrarse a algo que hiciera olvidar las privatizaciones y los recortes, y que, a su vez, le impulsara hacia la popularidad que había perdido.

Entre un referéndum no vinculante, dobles discursos acerca de la independencia y la ruptura con Unió, Artur Mas se las apañó para presentarse ante el pueblo como valedor de la independencia de Catalunya. Incluso cedió a situarse en el cuarto puesto de una lista electoral bajo la condición de ser investido President de la Generalitat. La ANC, Omnium Cultural, la AMI y ERC (entre otros), consintieron a las pretensiones de liderazgo de Mas, pero no lo hizo el otro gran agente político independentista, la CUP-CC, que veía a Mas y a CDC como la antítesis en sus planteamientos anticapitalistas, feministas y democráticos. Para ellas y ellos la imagen de la ruptura con España no puede ser la misma que ha defendido la Constitución Española con ahínco, de quien ha pactado tradicionalmente con gobiernos de la derecha española, de quien está constantemente bajo la sospecha de la corrupción y de quien mediante recortes y privatizaciones ha causado y sigue causando sufrimiento a las clases populares.

La CUP-CC ha hecho caso a las y los catalanes que les dieron su voto el 27S, ha dado la palabra a toda la militancia en asambleas locales y nacionales para decidir entre todas y todos, y ha negado su apoyo a quien no es garante de derechos, libertades e independencia. En definitiva, ha cumplido con su programa, ha sido transparente y democrática, y ha dado una lección de coherencia, responsabilidad y credibilidad.

Aitor Miguel: «La banca que no es ética es la que hace la guerra»

El militante de Alternatiba y concejal en Gasteiz por EH Bildu Aitor Miguel ha defendido la posición de la coalición, en el pleno de Gasteiz celebrado ayer, por una banca pública y ética.

Miguel ha defendido que queremos una banca ética «para que ese bancas no estén especulando, ni jugando con intereses básicos de la sociedad» así como pública, para que se someta al control ciudadano y de las instituciones, en este caso del Ayuntamiento de Gasteiz.

El concejal ha querido remarcar también que así como la banca convencional es la que ejerce los desahucios o no da creditos a las pequeñas empresas es además «la que hace la guerra» invirtiendo miles de millones en la empresa armamentistica. Inversiones encabezadas por el BBVA y en las que toma parte también la propia Kutxabank.

Oskar Matute: “Hay que empoderar al pueblo frente a las élites dominantes”

Audio de la entrevista realizada al portavoz de Alternatiba y parlamentario de Euskal Herria Bildu, Oskar Matute, en el magazine matutino Kalegorrian de Info 7 irratia.

«Esta mañana EH Bildu ha registrado en la cámara de Gasteiz la “Ley de Empoderamiento Ciudadano”. Una ley sobre la que hoy, en Kalegorrian, hemos preguntado a Oskar Matute, parlamentario de la coalición soberanista.

ENTZUN HEMEN

Matute ha defendido la citada ley “porque visto que la vía bilateral con el Estado está agotada, el único camino es la unilateralidad y para eso hay que empoderar a la ciudadania”. El parlamentario de EH Bildu también se ha referido al desalojo y posterior derribo hoy del gaztexe Kortxoenea en Donostia, para mostrar su solidaridad con el centro autogesitonado y denunciar lo que ha calificado de “ataque contra un espacio libre”.»

Video: «Pan, poder y rosas». Agenda política básica del feminismo

El pasado viernes 23 de octubre, organizado por Alternatiba, reflexionamos con Irantzu Varela de Faktoria Lila sobre la composición de una agenda política básica femenista que debieran tener los partidos políticos.

En charla, celebrada en el Hika Ateneo de Bilbao, hablamos de igualdad, de violencia machista, participación política… Aquí os dejamos el video de la intervención central de Irantzu. Eskerrik asko a todxs por acudir.

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Unidad, ¿por qué no?

Vivimos tiempos de cambio. Hay una sensación difusa en el ambiente, esa sensación que acompaña a los momentos históricos determinantes. El análisis racional también lleva a pensar que estamos en una época de cambios. La gran crisis global que sacude al sistema capitalista ha provocado efectos aún más profundos en las zonas periféricas de la Unión Europea, como Grecia y el Estado español, donde la estructura económica y política estaba menos consolidada. Esta periferia ha quedado definitivamente relegada a un estatus subalterno en lo político y lo económico, consecuencia de lo cual se da un impresionante retroceso en los derechos sociales y el nivel económico de sus clases populares.

En el Estado español la crisis y la brutal regresión centralista han desembocado además en una quiebra del modelo territorial cuyo máximo exponente es el proceso soberanista catalán. Por otro lado, la corrupción ha provocado la pérdida de la confianza de la ciudadanía hacia las estructuras políticas tradicionales, certeramente rebautizadas como “la casta”. La crisis, la corrupción y el agotamiento del sistema político-territorial implantado en 1978 han provocado la aparición de nuevos movimientos que han aportado la ilusión del cambio en un escenario que parecía inamovible.

Mientras tanto, Euskal Herria, protagonista durante mucho tiempo de una movilización sociopolítica sostenida sin parangón en el entorno,  parece situarse en una situación de impasse. La crisis ha impactado muy duro, pero para muchos la comparación con la pésima realidad del Estado provoca un efecto conservador y mejora la imagen de los gestores locales. El hundimiento del PPSOE abre además nuevos espacios de gestión al PNV. Paradójicamente, el PNV, representante vasco de la casta,  sale reforzado a corto plazo de la crisis de un sistema del que ha sido un pilar, convirtiéndose en el muro de contención del Régimen, que le presta su apoyo para frenar el paso a las opciones transformadoras. Por eso, por ejemplo, mientras la policía asalta las sedes de la hoy díscola Convergencia para poner en evidencia su (indudable) naturaleza corrupta, los medios del sistema ponen sordina a la realidad de clientelismo y corrupción que rodea al PNV.

A pesar de ello se puede y se debe salir de este impasse. La izquierda vasca, las izquierdas, aún tienen mucho que decir. En su conjunto, la suma de las opciones de izquierda transformadora se constituiría como la primera fuerza política del país. De hecho, los efectos de la articulación de esta mayoría ya se han comprobado en Nafarroa.

El objetivo de las personas abajo firmantes es romper con las políticas del austericidio, del retroceso y pérdida de derechos de la ciudadanía, impulsar medidas que defiendan los intereses de los y las trabajadoras, y de la inmensa mayoría de ciudadanos y ciudadanas, para que se nos reconozca como sujeto político, abriendo un Proceso constituyente que permita el ejercicio de los derechos de decisión sobre todos los aspectos de la realidad que nos afectan e interesan como vascas/os, navarras/os.Queremos elaborar políticas para llegar a una paz justa e inclusiva. sin vencedores ni vencidos, una paz que acabe con las leyes, medidas e instituciones de excepción existentes; una paz que parta del respeto a todos los derechos humanos para todas las personas y del reconocimiento de los derechos y los  sufrimientos de todas las víctimas.

Sabemos y somos conscientes, que para conseguir estos objetivos no solo necesiamos acumular votos por el cambio, sino que tenemos que crear poder y unidades populares en defensa de todos los derechos en todas las dimensiones. Necesitamos impulsar el proceso de acumulación de fuerzas ya en marcha y generar dinámicas unitarias de la ciudadanía por el Cambio.

Reconocemos, además, que este proceso ha de situar las reivindicaciones de la lucha feminista en primera línea, en pie de igualdad y nunca supeditadas al resto de avances, para no incurrir así en un error clásico de las izquierdas.

Partimos de que el avance en este proceso de Unidad Popular no va a venir de una suma de siglas artificial, tendrá que  partir desde abajo, desde un nuevo impulso de las ilusiones y de la participación de la ciudadanía, con asambleas plurales y democráticas en todos los lugares.

Las experiencias iniciadas anteriormente nos dicen que solamente podremos avanzar a partir de un enfoque nuevo de confianza y comprensión mutuas, de compartir iniciativas y experiencias conjuntas y exitosas, con los necesarios debates y clarificaciones de posiciones. Algo lógico desde fuerzas, sensibilidades y tradiciones diferentes. Este proceso no puede resolverse a golpe de voluntarismo, necesitará del ensayo social y político. Además, será imprescindible también reconocer que existen otras sensibilidades a favor del cambio, en sectores de base del PSOE, en IU,  Equo o Republicanos, así como en otros muchos sectores independientes que a día de hoy no se han identificado con una u otra de las diversas expresiones políticas mayoritarias actuales (EH BILDU o PODEMOS), pero que están ahí, en el ámbito de los movimientos sociales activos, en otros campos de las movilizaciones, en la defensa de lo profesional o en el ámbito de la innovación artística, técnica y/o científica y que tienen igualmente intereses y miradas propias, pero con propuestas comunes por el Cambio, por los derechos humanos y por el empoderamiento y articulación socio política de todos ellos.

Las personas abajo firmantes pensamos que ahora es el momento de iniciar esta nueva andadura.  ¡Sí, se puede! Y estamos dispuestas a trabajar para cimentar por abajo este nuevo camino de futuro para la ciudadanía, construyendo Unidad y Poder popular en todos los rincones de nuestra casa.

Kepa Gonzalez (concejal Orain Amurrio), Luis Ángel Sanchez de la China (concejal Galdakao Orain),  Aitor Huarte (estudiante), Eñaut Gracia (concejal de EH Bildu en Errenteria), Alba Fatuarte (miembro de Alternatiba y concejal de EH Bildu en Bilbo), Andoni Rojo (Miembro de EH Bildu)

Publicada en ElDiarioNorte

Matute: «Queremos empoderar a la ciudadanía vasca frente a quienes quieren condenanarla a la minoría de edad»

No pasamos por alto que en este país existen ya movimientos sociales que trabajan día a día por el empoderamiento de la ciudadanía, y que abordan cuestiones tan importantes como el Fracking, el aborto, las pensiones. La Ley que promovemos pretende ser la herramienta mediante la cual las mujeres y los hombres de este país podrán recibir toda la información necesaria para debatir y decidir sobre todo aquello  que les afecta en el día a día; y además lo puedan hacer con todas las garantías democráticas.

Nuestro compañero y portavoz de EH Bildu, Oskar Matute ha señalado que iniciarán una dinámica de trabajo para recoger las aportaciones de los agentes sociales y de la ciudadanía, con el fin de que lo que se presente en el Parlamento de Gasteiz sea la propuesta de ley “de todo un pueblo”

No queremos iniciar esta rueda de prensa sin recordar al refugiado saharaui Hassanna Aalia, que fue detenido en el día de ayer por la policía española y que a pesar de que fue liberado, se le han concedido 48 horas para abandonar el Estado español. Es denigrante la actuación que está teniendo el Estado con Aalia, que está condenado a cadena perpetua por Marruecos y que a pesar de que se encuentra a la espera de que se le conceda el asilo político por parte de la Audiencia Nacional, anoche se encontró con esta triste situación. Una vez más, el Estado español evidencia que el respeto de los derechos humanos es un tema que le resulta totalmente ajeno y que cede a las presiones de Marruecos siendo consciente que con su decisión pone en grave peligro la vida de una persona que lo único que ha hecho es luchar pacíficamente por los derechos de su pueblo.

Cuando anunciamos el 22 de septiembre que íbamos a registrar en el Parlamento de Gasteiz la Ley para el Empoderamiento de la Ciudadanía ya dijimos que nuestro deseo era presentar el contenido y los principios de la Ley en la calle, en Plaza Pública. Porque consideramos que una ley de estas características y principios no puede ser la aportación de una sola fuerza política. Una ley que pretende ser la herramienta para  empoderar a la ciudadanía y que esta pueda tomar sus propias decisiones para trazar su futuro, tiene que recoger necesariamente las aportaciones de agentes sociales, sindicales y políticos, así como las del conjunto de  la ciudadanía. Y eso es lo que haremos a partir del sábado y durante las próximas semanas.

El acto de presentación pública de la Ley de Empoderamiento para la Ciudadanía va a consistir en un encuentro de trabajo que tendrá lugar este sábado en Ezkerraldea, en la Plaza del Solar de Portugalete, a partir de las 10:30 de la mañana. Además de la presentación de los contenidos de la ley, queremos contrastar con la ciudadanía los principios y contenidos de la misma; para recoger aportaciones y adaptarla a la realidad y a las necesidades de la gente. En ese sentido, ampliamos la invitación a  todos los agentes y personas interesadas en el empoderamiento de la ciudadanía a hacernos llegar sus opiniones para poder ir construyendo un nuevo escenario político ilusionante en el que las personas sean el centro de la actividad política.

No pasamos por alto que en este país existen ya movimientos sociales que trabajan día a día por el empoderamiento de la ciudadanía, y que abordan cuestiones tan importantes como el Fracking, el aborto, las pensiones. La Ley que promovemos pretende ser la herramienta mediante la cual las mujeres y los hombres de este país podrán recibir toda la información necesaria para debatir y decidir sobre todo aquello  que les afecta en el día a día; y además lo puedan hacer con todas las garantías democráticas.

La Ley de Empoderamiento para la Ciudadanía será registrada el 4 de noviembre, fecha hasta la que desde EH Bildu pondremos en marcha diferentes iniciativas para recoger aportaciones; para que la ley que registraremos en el Parlamento de Gasteiz sea de la sociedad y no solo de una formación política. Todo para que las gentes de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa puedan tomar las riendas de su futuro, tanto en lo político, lo económico como en lo social, a partir de 2016. Desde EH Bildu creemos que hay que echar a andar, salir de la parálisis en la que nos encontramos y que hace que sean otros quienes toman las decisiones y condenan a la ciudadanía vasca a la minoría de edad permanente.

Desde luego, pretendemos que esta herramienta nos permita decidir el futuro político de este país. Pero la Ley de Empoderamiento de la Ciudadanía quiere ir más allá. Vivimos en un país con 200.000 personas desempleadas; con unas tasas de paro juvenil alarmante que superan el 40% y que son las más altas de Europa; con una precariedad laboral que obliga a muchas personas jóvenes a buscarse un futuro lejos de su país, con unas tasas de pobreza alarmantes… Nos encontramos en una situación de emergencia social que requiere que toda la sociedad se involucre; proponga y tome las decisiones para superar esta situación. Y la Ley de Empoderamiento de la Ciudadanía será la herramienta para que los hombres y mujeres de la CAV decidan si deben o no ejecutarse desahucios; si debe de rescatarse a personas o a bancos; o sí deben de blindarse grandes infraestructuras o derechos sociales.

De todo esto hablaremos e intercambiaremos pareceres en el taller que realizaremos el sábado en Portugalete y al que invitamos a participar a todas las personas y agentes de este país interesados en aportar. Como decíamos, queremos que la Ley de Empoderamiento de la Ciudadanía sea la herramienta de toda una sociedad que desea tomar las decisiones concernientes a su presente y a su futuro. Solo así construiremos un nuevo escenario en el que situemos a las personas y la dignidad de las mismas en el centro de las decisiones estratégicas de este país.

EH Bildu

La independencia es la herramienta, no el destino

Sandra Llano – Alternatiba Gazteak

En estas semanas en las que parece desintegrarse el presuntamente antiquísimo Reino de España, conviene recordar el auténtico significado de la independencia y, sobre todo, de la soberanía. Y es que para la izquierda, la independencia no debe ser un objetivo final en sí mismo.No al menos desligándolo de otro concepto tanto o más importante como lo es la mentada soberanía.

Y es que mirando cualquier mapamundi, podemos ver países supuestamente independientes a raudales. Cada uno con su bandera, su himno, su ejército y sus selecciones deportivas. La cuestión es si son soberanos. Y es que hemos visto como a países como Grecia, les ha sido arrebatada su soberanía, su capacidad para garantizar por sus medios y decisiones la vida digna de las mujeres y los hombres que componen ese país; insistimos, independiente pero no soberano.

Hay quien se reivindica de izquierdas pero no termina de definirse en cuestiones como el derecho a decidir, con la premisa de que lo primero es combatir los recortes de la derecha. El proceso catalán nos deja evidencias de esa izquierda con las ideas tan poco claras, o más bien con las voces muy poco definidas.

Desde luego, no podemos obviar que afrontamos este proceso en un contexto de crisis sistémica, caracterizada por una situación generalizada de pobreza a nivel mundial, desigualdad creciente, dictadura de los mercados y superación de los límites físicos del planeta.

Euskal Herria, como Catalunya, no es una excepción y la ciudadanía sufre una grave conculcación de derechos políticos, civiles, económicos, culturales y sociales. Particularmente las mujeres, porque allí donde hay pobreza, desigualdad o conculcación de derechos las mujeres siempre las sufrimos en mayor medida que los hombres.

Así, son cada vez más las y los ciudadanos que viven situaciones desesperadas y de auténtica exclusión social, ya que las imposiciones de los poderes financieros que los estados francés y español aplican a rajatabla hacen imposible no solo retornar a lo que otrora se llamaba estado del bienestar sino a mantener unos mínimos que permitan vidas dignas.

Y creemos firmemente que es posible construir una Euskal Herria no solo independiente sino también soberana, cimentada en la justicia social. Por ello, construcción nacional y construcción social pueden y deben ir de la mano. La izquierda soberanista no puede renunciar a ninguna de las dos vertientes, porque en realidad son caras de la misma moneda. 

La independencia es una oportunidad de construir un país más justo, unas vidas más dignas y una realidad más igualitaria. Y el peso político que la izquierda alcanza en los procesos electorales en Euskal Herria nos demuestra que es más posible esa realidad aquí que en el conjunto del estado. Pero esta realidad, además, conecta de lleno con unas reivindicaciones históricas y con una cultura e idioma propios; pero por encima de todo conecta con la voluntad mayoritaria de la sociedad vasca de querer decidir, como pueblo emancipado, en libertad y sin cortapisas ni amenazas de ningún tipo, cual debe de ser su futuro.

Por eso, la Euskal Herria que perseguimos es aquella donde las clases más desfavorecidas tengan oportunidades de vivir dignamente; donde se luche activamente contra las desigualdades entre hombres y mujeres; donde seamos conscientes y consecuentes con los límites naturales del planeta; donde tengamos pleno derecho a vivir en nuestra lengua. Y solo será posible en la medida en que podamos alcanzar la hegemonía política y social, en la que desde luego los partidos políticos son tan solo una pieza más del engranaje, para condicionar la agenda de un estado en descomposición multidimensional (corrupción, recortes, vulneraciones sistemática de derechos, dejes totalitarios…) y sus instituciones.

En definitiva, se trata de que en este viaje que ya hemos emprendido, no nos dejemos la coherencia por el camino respecto a nuestro objetivo, ni las aspiraciones de las personas esperanzadas en este proceso y que sí están dispuestas a acompañarnos en este viaje.

¡El nuevo número de «Alterkaria» ya está en la calle!

Quinto número del Alterkaria, la revista de la organización política Alternatiba. Recogemos nuestros últimos artículos de opinión asi como noticias, a hilo de las recientes elecciones en Catalunya, ademas de dedicarle la portada entrevistamos a Jaume Casals de la CUP por un lado y explicamos nuestra apuesta por las CUP. En este número, entre otras cosas, tambien hablamos de la violencia machista, de la crisis de las personas refugiadas, de la diferencia entre independencia y soberanía o de la actualidad política griega tras las últimas elecciones. Si quieres recibir Alterkaria en casa, escribe a prentsa(arroba)alternatiba.net

 

http://alternatiba.net/old-files/Alterkari_05.pdf

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