Alternatiba llama a secundar la manifestación de mañana en Bilbao por las condenas a los militantes saharauis de Gdem Izik

El portavoz de la Mesa Internacionalista de Alternatiba, Gonzalo Fernández, ha llamado hoy a secundar la manifestación convocada por la diáspora saharaui en Bizkaia, en colaboración con la delegación saharaui en Euskadi, mañana en Bilbao en protesta por las duras sentencias impuestas por Marruecos a los activistas del campamento de Gdem Izik: “Rechazamos las penas a las que han sido sometidos los presos políticos de Gdem Izik, al tratarse de un juicio farsa que no ha contado con las mínimas garantías judiciales y procesales, tal y como han reconocido observadores internacionales como el profesor de la UPV/EHU Juan Soroeta, y de un juicio político contra la población saharaui que legítimamente reclama el derecho de autodeterminación de su pueblo”.

El portavoz de la formación de izquierdas ha reiterado que “se trata de una condena injusta en el marco de unos hechos no probados ni esclarecidos”. En noviembre de 2010 multitud de mujeres y hombres saharauis se concentraron pacíficamente, conformando un campamento en Gdem Izik (territorio saharaui ocupado por Marruecos) “para denunciar el sistema de terror imperante en el Sahara Occidental, por lo que fueron duramente reprimidas por las fuerzas policiales marroquíes, dando lugar a una serie de muertes sin concretar, como la de 2 saharauis sobre los que no ha habido investigación alguna”. En ese marco se detuvo “indiscriminada y aleatoriamente” a personas que participaron en dicha actividad, acusándoles de estas muertes.

Desde Alternatiba han exigido al gobierno marroquí el esclarecimiento total de los hechos, así como la paralización de la “práctica sistemática de violación de derechos humanos ejercida en el Sahara Occidental y el reconocimiento del derecho de autodeterminación del pueblo saharaui”. Asimismo, han exigido al gobierno del Reino de España “que asuma su responsabilidad histórica y defienda en todos los ámbitos internacionales la defensa de dicho derecho de autodeterminación. Por último, le solicitamos que incida sobre la Unión Europea para romper todo acuerdo comercial y económico con Marruecos que suponga el expolio de los bienes naturales saharauis».

Militantes de Alternatiba, con el portavoz de la Mesa Internacionalista a la cabeza, participarán en la manifestación que partirá mañana jueves a las 18:30 desde la plaza del Teatro Arriaga hasta el nº27 de Alameda de Rekalde, que acoge el consulado marroquí.

https://fbcdn-sphotos-c-a.akamaihd.net/hphotos-ak-ash3/860835_608563472494306_2108268137_o.jpg

https://fbcdn-sphotos-g-a.akamaihd.net/hphotos-ak-prn1/823390_608563779160942_514128061_o.jpg

https://fbcdn-sphotos-b-a.akamaihd.net/hphotos-ak-frc1/823595_608563739160946_174063720_o.jpg

https://fbcdn-sphotos-h-a.akamaihd.net/hphotos-ak-prn1/859922_608564065827580_325180598_o.jpg

https://fbcdn-sphotos-e-a.akamaihd.net/hphotos-ak-ash3/164479_608564095827577_2064970258_n.jpg

Un Ecuador hacia el Buen Vivir

Gonzalo Fernández Ortiz de Zárate – Mesa Internacionalista de Alternatiba

Según la mayoría de las encuestas publicadas, el pueblo ecuatoriano volverá a elegir el próximo 17 de febrero a Rafael Correa como presidente del país, sin necesidad de celebrar una segunda vuelta. Así, si estos sondeos se confirman -y si el voto indeciso no da alguna sorpresa-, Correa y el Movimiento País contarán con otros 4 años para avanzar en su apuesta por el socialismo del buen vivir, partiendo de una notable presencia en la nueva Asamblea Nacional, que también se elige en esta fecha.

Las razones de este nuevo éxito electoral son múltiples, pero destacamos tres: la primera es la incapacidad de la derecha para presentar una candidatura unitaria. De esta manera, bien porque los grupos empresariales y oligárquicos detrás de cada candidato conservador defienden intereses diferentes –que pretenden posicionar como oposición en la nueva Asamblea-, bien porque la derecha han amortizado la elección presidencial –y plantea diversas candidaturas para valorar su proyección futura-, el voto de una derecha en retroceso se ha dividido en 6 diferentes opciones. La segunda razón es que nadie en la izquierda hace sombra a día de hoy a la hegemonía del Movimiento País. Así, Alberto Acosta, el otro candidato de izquierdas a la cabeza de la Coordinadora de Unidad Plurinacional, apenas llega al 2-4% de intención de voto, frente al más de 55-60% de Correa. Finalmente, y en tercer lugar, la ciudadanía -y sobre todo los sectores populares de Ecuador- han visto mejoras palpables en sus vidas desde que se pusiera en marcha la revolución ciudadana planteada por Correa, por lo que dicho apoyo se refleja electoralmente.

Esta última es quizá la razón más importante que explique los sondeos. También aquí los motivos son múltiples. En primer lugar, es indudable la vocación del actual gobierno por activar las políticas públicas de incidencia sobre el conjunto de la ciudadanía. En este sentido, se ha producido una notable reducción en los índices de pobreza y desigualdad, recuperando al estado como agente de transformación a través de una mayor voluntad y capacidad rectora y redistribuidora. En segundo lugar, se ha conferido una estabilidad institucional muy notable a un país acostumbrado históricamente a constantes y violentos cambios de gobierno, y se ha ahondado en los procesos de descentralización y democratización, estableciendo incluso fórmulas de democracia directa en aspectos tan relevantes como la reforma de justicia o las corridas de toros -actualmente prohibidas en algunas provincias-.

En tercer lugar, la población valora positivamente la recuperación de la dignidad nacional del país, así como su vocación por participar del proceso de integración latinoamericana. De este modo, Ecuador se ha enfrentado a los organismos internacionales como el FMI, y ha tomado parte en todos los procesos de emancipación continental (ALBA, UNASUR, CELAC, etc.). Por último, y en cuarto lugar, la población confía en la explícita apuesta del Movimiento País por transitar desde una economía capitalista y desde un estado burgués hacia un socialismo del Buen Vivir -en el que la vida y no el capital se sitúe en el centro, incluyendo los derechos de la naturaleza- y hacia un estado plurinacional. Esta es la gran apuesta, el gran compromiso de Correa y del conjunto de su movimiento –junto al de muchas otras gentes y organizaciones que participaron en la avanzada Constitución vigente-, un compromiso sistémico que trasciende los ritmos electorales y cortoplacistas, y que se proyecta en términos históricos.

Precisamente por ello, y como no podía ser de otra manera, esta apuesta en el largo plazo no está exenta de dificultades. Tanto es así que se ha convertido en el punto de conflicto más importante no sólo entre las izquierdas ecuatorianas, sino también en todos los países con gobiernos de cambio. ¿Se está avanzando en esa transición de sistema? ¿Se pueden pedir más avances, teniendo en cuenta el punto de partida, el poco espacio de tiempo transcurrido, y el papel obstruccionista de una derecha que detenta hegemónicamente el poder económico y mediático? ¿Es posible pasar ya de un modelo que prioriza un extractivismo redistributivo (petróleo, gas, etc.) a una matriz productiva nueva?

Los  ritmos y las voluntades políticas en torno a esta transición suponen la máxima expresión del enfrentamiento actual entre las izquierdas diversas. Para unas, insuficientes; para otras, en el margen de lo posible. Ahí se sitúan nudos importantes como los de la ley del agua, o el de la posibilidad de reabrir el debate sobre los alimentos transgénicos. No obstante, y además de esta gran cuestión, hay también otros ámbitos de conflicto más específicos de Ecuador. Así, por un lado, la Coordinadora de Unidad Plurinacional acusa a Correa de formas autoritarias de gobierno, de criminalizar la protesta social y de mantener una actitud confrontativa con las organizaciones no alineadas con su programa.

Al mismo tiempo, y por el otro lado, desde filas oficialistas se acusa a la Coordinadora de ejercer una oposición sin concesiones, igualando a Correa con la derecha; de asumirse como alternativa más radical, cuando por otro lado se hace una defensa naif de los principios y las estructuras de la agónica democracia liberal-representativa (apelando por ejemplo a la libertad de prensa frente a los conflictos del gobierno con los grandes medios de la derecha, o apelando a la separación de poderes en torno a una reforma de un justicia parcial y conservadora); finalmente, también se lanzan ataques sobre el papel timorato, cuando no complaciente, que algunas personas y organizaciones de dicha Coordinadora jugaron en el golpe de estado del 30 de septiembre de 2010.

Éste es el punto de partida para este nuevo mandato de Correa. Confiamos que sea, por un lado, el mandato en el que se avanza exponencialmente y de manera inequívoca en términos de socialismo para el Buen Vivir; por el otro, deseamos también que las diferentes izquierdas ecuatorianas se articulen en base a agendas comunes, con voluntad constructiva y respeto mutuo. Es labor del gobierno, pero también de la oposición. Ambos deben asumir dicha responsabilidad, porque la oportunidad que se ha abierto en Ecuador con la revolución ciudadana no se puede desaprovechar. El pueblo ha despertado, y ya no le da la gana de volver a dormir. El camino es claro, es el socialismo, es el buen vivir, es la dignidad. Por ello todo nuestro apoyo internacionalista al proceso ecuatoriano, que tanto nos ha enseñado y tanta esperanza ha traído a la izquierda mundial.

Declaración Cumbre de los Pueblos reunida en Santiago de Chile

La Cumbre de los Pueblos, que reunió este fin de semana en Chile a más de 500 organizaciones no gubernamentales (ONG), concluyó hoy con un llamamiento a los países latinoamericanos y europeos para buscar un modelo económico «más humano».

Declaración de la Cumbre de los Pueblos:

En el marco da la Cumbre de los Pueblos realizada entre los días 25, 26 y 27 de Enero de 2013, en Santiago de Chile, las organizaciones y movimientos sociales y políticos de los diferentes países de América Latina, el Caribe y la Unión Europea declaramos lo siguiente:

Hoy, somos testigos de cómo los bienes naturales, los derechos y las personas han sido mercantilizadas en las naciones y pueblos de América Latina, Europa y el Caribe, producto de la lógica capitalista, que en su vertiente neoliberal y machista, permite su instalación y profundización a través de aparatos cívicos, políticos, militares.

Las relaciones existentes entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe que priorizan los privilegios y ganancias de los inversionistas frente a los derechos de los pueblos a través de acuerdos comerciales y acuerdos bilaterales de inversiones, profundizan este modelo que perjudica a los pueblos de ambas regiones.

Es así, que estos Estados mercantilistas, las transnacionales y las corporaciones continúan siendo administradores y profundizadores de la pobreza y la desigualdad social en el mundo, amparados por un tipo de democracia representativa, de mano de la elite, que se aleja de los intereses de las grandes mayorías de nuestro pueblo.

Esta hegemonía del capital financiero se manifiesta entre otros en la privatización y mercantilización de los servicios públicos, el desmantelamiento del Estado de bienestar, la precarización del trabajo, el extractivismo, la usurpación, la destrucción y mercantilización de los bienes naturales y sociales propios del pueblo y el desplazamiento forzoso de los pueblos originarios, provocando las crisis alimentarias, energéticas, climáticas.

En la Unión Europea la crisis capitalista ha significado un verdadero golpe de estado financiero que ha impuesto políticas de austeridad en contra de los derechos de los pueblos, de los derechos laborales, ambientales, etc. La troika europea (FMI, BCE, Comisión Europea) obliga los estados a endeudarse para salvar los bancos para que seamos los pueblos los que paguen la crisis provocada por ellos mismo.

Al mismo, es necesario visibilizar la creciente opresión y discriminación hacia las mujeres en América Latina, el Caribe y Europa.

No obstante, a este panorama que parece adverso, reconocemos procesos históricos y recientes a partir de las luchas de nuestros pueblos en el mundo, que han logrado tensionar y agrietar las actuales lógicas y nos dan la esperanza de que otro mundo es posible.

De este modo, surge la necesidad de construir las bases para un nuevo modelo de sociedad que transforme las actuales lógicas y coordenadas políticas, económicas, sociales y culturales en todas nuestras naciones y pueblos de ambos lados del continente las luchas de los diferentes actores y organizaciones del campo popular.

Para alcanzar estos objetivos proponemos que:

Los derechos y bienes naturales arrebatados a nuestro pueblo deben ser recuperados, por medio de la nacionalización, la comunitarización de los bienes y servicios y los medios de producción y el reconocimiento constitucional de la naturaleza como sujeto de derecho. Esto implica pasar de ser resistencia y movimientos reivindicativos a una alternativa que contenga una propuesta política-social integral de país.

Promover el paradigma del buen vivir basado en equilibrio del ser humano con la naturaleza y el medio ambiente y los derechos de la tierra, al servicio de los pueblos, con una economía plural y solidaria.

Democracia directa, participativa y popular y su concretización desde las bases sociales. Para ello, es necesario la integración de actores sociales y políticos del mundo, valorando prácticas territoriales y haciendo el dialogo entre las instancias locales y globales.

Promover la integración en la participación política de los niños y niñas y las juventudes, desde un enfoque de género. Respeto a la libre determinación de los pueblos originarios del mundo, entendiéndolos como pueblos hermanos no sometidos a la territorialidad impuesta por la colonización. Esto, sumando a la promoción de la soberanía alimentaria en perspectiva de una autotomía territorial que a los pueblos y comunidades decidir qué y cómo producirlo.

En cuanto al avance de la represión y la criminalización de la protesta, movimientos sociales y populares, debemos articularnos de tal manera de generar la fuerza necesaria para frenar el avance de leyes antiterroristas y la inserción en las comunidades indígenas de nuestros pueblos, como a su vez la militarización imperialista que ha instalado bases militares en América Latina, Europa y el Caribe.

Sensibilizar, agitar y promover luchas contra las transnacionales, mediante campaña de denuncias y boicot en todos los niveles.

Posicionar el feminismo con un proyecto político antipatriarcal y anticapitalista. Reconocer y promover los derechos de los migrantes y los derechos de los pueblos de libre tránsito entre las naciones.

Plena solidaridad con el pueblo Palestino y todos aquellos pueblos y naciones oprimidos por el poder colonizador y el imperialismo, así como el repudio a las intervenciones cívicos-militares en Honduras, Haití y Paraguay. Apoyamos los procesos de paz, con la participación de los actores sociales y políticos en Colombia. Solidaridad con el pueblo cubano en contra del bloqueo, con Argentina en el proceso de recuperación de las Malvinas, con Bolivia y su demanda por salida al mar, con el pueblo Venezolano en el proceso Bolivariano y con los movimientos sociales en Grecia y España. En el caso de Chile, solidaridad con el movimiento estudiantil en defensa de la educación pública, gratuita y con el pueblo-nación mapuche contra la represión realizada de parte del Estado.

Acompañando la lucha por la soberanía de nuestros territorios en América Latina, es necesario luchar por el respeto de la soberanía de nuestro cuerpo como territorio propio de las mujeres.

Entendemos que la superación de la precarización laboral a la que se ven expuestos las mayorías de trabajadores en América Latina y el mundo, pasa por un cambio estructural que altere las relaciones de propiedad y producción de bienes y servicios valorando la labor esencial que desempeñan los trabajadores y trabajadoras como sustento sobre el cual se construye toda sociedad.

De manera transversal, debemos avanzar en la construcción de plataformas de lucha comunicacional que no sólo permitan develar y difundir las demandas y alternativas de nuestros pueblos frente al modelo hegemónico, sino también como forma de explicar las verdaderas causas de los problemas que hoy nos aquejan.

Debemos ser capaces de construir demandas unitarias que aglutinen a todos los actores sociales y pueblos en disputa y que a su vez nos permitan trazar un horizonte estratégico hacia el cual avanzar, articulando y organizando la unidad entre el movimiento sindical, social y político en América Latina, el Caribe y Europa. Esto debiera traducirse en una hoja de ruta de trabajo y de movilizaciones para el presente periodo, pero con perspectivas a largo plazo.

Al mismo tiempo, fortalecer la organización social y popular en cada sector de inserción, potenciando la amplificación de nuestras demandas a las grandes mayorías por medio de la politización y la movilización.

No podemos dividir más las instancias organizativas en las que estamos, conducir hacia un proyecto en la diversidad es el mayor desafío que se nos presenta para la generación de una alternativa real de poder popular. Romper con los sectarismos que fragmentan, dividen e impiden la construcción de unidad del campo popular, es una tarea urgente.

Frente al poder del bloque dominante sólo la unidad y la solidaridad entre nuestros pueblos nos darán la fuerza necesaria para alcanzar nuestros más alto objetivos y vencer.

Santiago de Chile, Enero 2013

Alternatiba felicita al Parlament e insta a los partidos catalanes a desobedecer al estado si fuera necesario

El portavoz de Alternatiba Jonathan Martínez ha felicitado públicamente al Parlament de Catalunya por haberse manifestado una vez más en defensa de su propia soberanía, “una soberanía que ya fue vulnerada por las estructuras del Estado español durante la aprobación del nuevo Estatut, que habiendo recibido el apoyo de la cámara catalana, fue posteriormente cercenado hasta vaciarlo de contenido”.

Por esta misma razón, desde la formación de izquierdas han instado a los grupos políticos catalanes a “evitar que la declaración se quede en papel mojado y, por lo tanto, a que se traduzca en un proceso de desobediencia real al Estado si fuera necesario, ya que existe un respaldo popular mayoritario y refrendado en el Parlament”.

Junto con las felicitaciones, Martínez no ha querido dejar de señalar algunas de las “carencias” del texto pactado por CiU, ERC e ICV: “Por un lado, se omite el conjunto de los Països Catalans como realidad nacional que trasciende a Catalunya, y por otra, se acoge acríticamente a la Unión Europea del capital y de la negación de los derechos de los pueblos, cuando debería ser la sociedad catalana la que se pronuncie al respecto”.

Desde Alternatiba, no obstante, han reiterado la enhorabuena tanto al Parlament como a la sociedad catalana, “que ha sido en última instancia la que con su movilización ha puesto en el primer plano social y político la reivindicación de su soberanía”. Por ello, consideran la declaración “un paso más hacia la libertad nacional del pueblo catalán”, pero subrayando siempre que “ese camino debe quedar ahora en manos de las mayorías populares, más allá de sus representantes políticos”.

Cruzando puentes a Irlanda del Norte

Maialen Lizarralde – Lokarri

Un año después de la experiencia del proyecto “Construyendo puentes de reconciliación”, un grupo de jóvenes de distintas sensibilidades viajó a Belfast con Lokarri del pasado 28 de noviembre al 2 de diciembre. Concretamente, tal y como Lokarri explicó en la presentación del proyecto, participaron en la experiencia miembros de Juventudes Socialistas de Euskadi, Gazte Abertzaleak, Ezker abertzalea, EGI y Alternatiba junto a dos personas de Lokarri.

La conclusión de la vivencia de este año vuelve a ser muy positiva: el hecho de conocer de primera mano el desarrollo del proceso norirlandés y la intensa convivencia entre las personas que participan en la experiencia generan procesos de aprendizaje, diálogo y compromiso difíciles de crear en otros contextos cotidianos.

Difícil es también explicar todo lo aprendido y vivido, pero a continuación intentamos ofrecer una breve crónica del viaje.

1º día: Dublin

La primera parada del grupo fue en Dublin y su parlamento con nuestro anfitrión Ruairi Rowan. Conocimos la institución de la mano de jóvenes del Sinn Féin y pudimos saludar brevemente a Gerry Adams antes de participar en una reunión con representantes del Sinn Féin, entre los que se encontraba Eoin Ó Broin autor del libro “Matxinada. Historia del movimiento juvenil radical vasco” (Txalaparta). En la reunión se destacaron la importancia del diálogo, el importante papel de la juventud o el apoyo internacional. Insistieron también en la paciencia ante momentos en los que parece que todo se bloquea: “siempre toma más tiempo de lo que se piensa”, nos decían. Acabamos el día con una ruta histórica organizada por el Sinn Féin por lugares significativos de Dublín.

2º día: Belfast, viaje al pasado y al futuro

El segundo día del viaje, ya en Belfast, comenzó con una mesa redonda en la sede de Healing Through Remembering, donde participaron periodistas como Brian Rowan y Eamonn Maille, jóvenes de Alliance Party y del Northern Ireland Youth Forum y el ex miembro del grupo armado unionista UDA Jackie McDonald. La conversación fue realmente interesante.

Los periodistas destacaban su papel activo por la paz: al ser agentes que mantienen relación con todas las partes, tenían la responsabilidad de relatar lo que ocurría, lo que tiene que ver con el proceso de la verdad. Tal proceso, que ellos prefieren llamar proceso de explicación o información, no debe confundirse con la acusación, culpa o el perdón, y ante todo no debe ser una batalla “de culpas” entre políticos. Cuando del grupo surgía la pregunta de qué hacer cuando el gobierno no se mueve, contestaban “no merece la pena insistir en criticar al gobierno. Lo que hace falta es persuadirlo, hacer pedagogía y, sobre todo, empezar a usar otro lenguaje. La paz no se trata de exigencias, sino de lo que estás dispuesto a compartir. Pide tomar riesgos y hacer cosas que incomodan”.

Los jóvenes norirlandeses también reafirmaron la importancia de relatar el dibujo completo de lo que ha pasado, ya que las secuelas del conflicto también han llegado a su generación en forma de desconfianza y culpas y es necesario romper barreras.

Por su parte, Jackie McDonald también lo reafirmó: la llave está en la gente joven, porque la carga de la violencia ha llegado a ella también. “Hay que contarles lo que pasó, sin romanticismos, sin orgullo: esto es lo que hicimos y no se debe repetir” decía. Como expresó, también habló de las dificultades que pasan al salir de la cárcel y de lo esenciales que son en cualquier proceso de paz.

Tras esta conversación, el grupo fue a visitar el parlamento norirlandés en Stormont. Conoció su funcionamiento y peculiaridades, se reunió con el presidente del parlamento William Hay y participó en una charla con parlamentarios del Sinn Féin, DUP, SDLP y UUP, donde se vio cómo son capaces de juntarse en la misma mesa representantes que hasta hace unos años eran enemigos.

3º día: las rejas perduran, las paredes hablan

El tercer día fuimos a visitar a la organización Intercomm que trabaja en las relaciones entre comunidades. Allí tuvimos una conversación con distintas personas, muchas de las cuales eran ex-presos tanto unionistas como republicanos que hoy en día trabajan juntos en proyectos como el de Intercomm. Subrayaron que el proceso de paz real ocurre y debe ocurrir en las bases de la sociedad, y ahí las personas presas liberadas tuvieron y tienen un papel clave, aunque todos confirmaron las dificultades a la hora de reintegrarse, bien por recursos prácticos, bien por el odio social generado. El grupo preguntó cómo explicarían a sus nietos/as su relato personal y afirmaron que les es muy difícil hablarles de ciertas cosas a sus familiares pero a la vez es necesario hacerlo para “desarmar las mentes”. “No somos malas personas. Somos buenas personas que han hecho cosas terribles”, expresó uno de ellos.

Uno de ellos, John Howcroft, quien fue miembro de un grupo armado unionista y hoy en día es trabajador social y doctorando, nos llevó después a visitar algunos barrios del norte de Belfast, que es la zona donde más se ha concentrado la violencia. Nos mostró murales que antiguamente favorecían la segregación y la violencia y que han sido renovados con el objetivo de comunicar valores a favor de la convivencia, muros que han sido abiertos para que las comunidades se puedan relacionar con más normalidad y edificios reformados en zonas muy conflictivas que ahora acogen personas de ambas comunidades. El ejemplo del propio John fue también revelador.

4º día: Falls Road con Brian Rowan

El periodista Brian Rowan ha sido testigo directo de muchísimos hechos históricos ocurridos durante el proceso de paz, y fue él quien nos llevó a ver las calles de las zonas republicanas alrededor de Falls Road mientras nos contaba anécdotas de esos hitos que él mismo presenció. Vimos murales, memoriales por las víctimas y tomamos un café mientras nos enseñaba el tesoro que había ido acumulando durante años: una carpeta con documentos, recortes y fotografías relevantes de los últimos años, incluyendo declaraciones originales de alto el fuego del IRA, entre otros. También visitamos el museo de presos republicanos antes de ir a reunirnos con Seanna Walsh en Tar Anall.

Seanna Walsh pasó 21 años en prisión por su implicación con el IRA. Amigo de Bobby Sands, fue él quién leyó el comunicado de 2005 donde el IRA declaraba su alto al fuego. Nos contó su relato sobre el proceso de los últimos años, explicando que “no es un conflicto entre católicos y protestantes o republicanos y unionistas. Nosotros en el IRA teníamos claro que nuestra lucha era contra la ocupación Británica, es decir, contra el Gobierno británico, y no contra los unionistas”. Contó cómo la espiral de la violencia no lleva a ningún lado, que por eso concluyeron que hay que intentar negociar con el Gobierno británico y todas las partes llegaron a la misma conclusión.

También hablamos sobre los disidentes del IRA, que son una minoría sin objetivos claros, sobre el proceso de excarcelación aprobado en 1998, sobre perdón, verdad y víctimas… Y para acabar, el grupo le preguntó cómo se había sentido cuando leyó el comunicado que anunciaba el alto el fuego del IRA, a lo cual respondió emocionado “orgulloso y honrado de hacerlo”.

La intensa agenda del viaje terminó con una reunión informal con juventudes del SDLP en un pub. Entre muchos temas, no dejaron de expresar su asombro y tal vez cierta admiración al ver a nuestro grupo de representantes de sensibilidades tan diferentes juntos y con una relación de tanta confianza compartiendo esta experiencia. “Parece que os conocéis desde siempre”, nos decían. Nos contaron que aunque hay relaciones entre las juventudes de distintos partidos, no saben si serían capaces de juntarse para una experiencia de este tipo. Ya les dijimos que quedan invitados a visitarnos.

Y es que como bien dice Ruairi Rowan en su crónica sobre nuestra visita en este artículo, parece que el aprendizaje fue en ambos sentidos y lo aprendido cruza los puentes de reconciliación entre y dentro del País Vasco e Irlanda del Norte.

Nota: pocas horas después de que el grupo regresara, estalló el conflicto que hoy aún perdura en relación a las banderas británicas. Dar seguimiento a la evolución de este conflicto relacionándolo con las reflexiones que nos compartían las personas con las que nos reunimos, también está siendo muy valioso. Vemos que su camino hacia la paz sigue con dificultades, que aquella “carga heredada” de la que nos hablaban está presente, y mostramos nuestro apoyo para que esta manifestación de violencia pueda canalizarse de manera que no pueda volver a repetirse.

Desde Cuba y desde Chiapas, mirando al futuro

Gonzalo Fernandez Ortiz de Zarate – Mesa Internacionalista de Alternatiba

Como cada comienzo de año, aprovechamos estas fechas para reflexionar sobre el pasado y sobre el futuro, sobre lo hecho y sobre lo que habrá que hacer en los próximos meses. Las perspectivas no parecen muy halagüeñas, y 2013 se nos anuncia como uno de los picos agudos de la tremenda crisis en la que nos encontramos. Desahucios, pobreza, recortes, privatizaciones, rescates, etc., son las palabras que se han incrustado en nuestro día a día, y parece que han venido para quedarse.

Ante ello, la izquierda, las izquierdas, debemos poner todo nuestro empeño para borrar dichos términos del diccionario. Frente a ellos, debemos luchar porque la vida, la emancipación, los derechos, la diversidad y la democracia se impongan como las palabras que anuncian nuevos modelos sociales, que prefiguren el final de la larga noche capitalista.

De esta manera, debemos hacer un esfuerzo especial por definir estrategias políticas que avancen en este sentido, que ofrezcan alternativas, que ofrezcan ilusión, que generen impacto. El comienzo de año es un buen momento para este tipo de reflexiones, algo acaba y algo empieza. Pero para mirar hacia delante, también debemos mirar hacia atrás, también debemos mirar a otras latitudes. La izquierda es, en el fondo, una voluntad histórica de emancipación, un sumatorio de luchas, de esperanzas, de dignidades, que siempre debemos tener en consideración. Pasado, presente, futuro, aquí y allá, es el complejo marco en el que nos movemos: aprender del pasado para, analizando el presente, construir estrategias sólidas para el futuro.

Precisamente estos días nos traen al recuerdo dos hitos históricos fundamentales para la izquierda: uno, la revolución cubana, triunfante el primero de enero de 1959; el otro, la toma de San Cristóbal y otras cuatro municipios chiapanecos por parte del EZLN, el mismo primero de enero, pero de 1994. Son procesos vivos, dinámicos, diferentes, polémicos, pero de su análisis extraemos lecciones muy importantes para el futuro, para el conjunto de la izquierda. También para la izquierda europea, tan huérfana de claridad y referentes.

El primer aprendizaje de ambos procesos es que la izquierda debe ser radical, debe confrontar con el sistema, proponer nuevas salidas políticas, económicas, sociales y culturales ajenas a las actuales. Ya no es tiempo de contemporizar, de reformas, de mejoras, es tiempo de transformaciones estructurales, desde lo sistémico hasta lo personal, pasando por lo organizativo. Ya no vale sólo con la resistencia, hay que pasar a la ofensiva. No se trata de mejorar el camino, de repararlo, de ensancharlo, sino de construir otro diferente. Si así lo entendieron las y los cubanos en los tiempos dorados de la socialdemocracia occidental –un estado del bienestar construido sobre la dominación de los países empobrecidos-; si así lo entendieron los y las zapatistas en plena hegemonía absoluta del neoliberalismo, ¿qué decir de los tiempos actuales, cuando la crisis es total? Todo lo que no sea construir algo nuevo, es ser cómplices de lo viejo.

El segundo aprendizaje se refiere a la necesidad de ensayar nuevas fórmulas de hacer política. Pobre de quien crea todavía que la vía electoral-institucional es la estrategia fundamental a la hora de avanzar en términos emancipatorios. Pobre también quien pretenda que los partidos son la vanguardia del cambio. Pobre quien confunda el éxito electoral en el corto plazo con la transformación. ¿Lo institucional es el fin o es el medio? La emancipación tiene lógicas propias, y no siempre tienen relación con las dinámicas políticas clásicas. Así, o asumimos la relevancia actual de los movimientos sociales, de sus agendas y formas de funcionamiento, o nos daremos contra una pared, en un mundo cada vez más alejado de la política tradicional.

En este sentido, es necesario priorizar la articulación entre todos los actores alternativos, de identidad y signo diferente. Una articulación real, de igual a igual, basada en debates comunes, estrategias comunes y confianzas mutuas, desterrando finalmente recelos, utilitarismos y jerarquizaciones más o menos explícitas. Todas las lecciones aprendidas exitosas trascienden los estrechos límites de la democracia liberal-representativa y de sus actores. Toda emancipación amplía el margen de la política y desnuda sus límites. Así lo entendió el Movimiento 26 de Julio cubano ante la incapacidad de los partidos políticos para liderar el proceso revolucionario. Así lo entendió el EZLN, que situó en las comunidades indígenas, y no en la partidocracia, el centro de la soberanía, la autonomía y de la justicia. Así lo ha entendido toda América Latina hoy en día.

El tercer aprendizaje destacable es que la política, la izquierda, es de las personas osadas, valientes, estrategas, prefiguradoras de nuevas agendas, de nuevos contenidos, de nuevas formas. Corazones calientes y cabezas frías, frente a corazones fríos y cabezas calientes. Siempre, pero ahora más si cabe, sobran los mediocres; los burócratas de espíritu; los que quieren cambiar el mundo con una calculadora en la mano; los que dicen luchar contra el sistema, pero necesitan precisamente de la realpolitik de ese sistema para ser alguien; los que cuentan los regates en el centro del campo como goles; los que no se salen del camino ni aunque les pasen por encima. Esa gente sobra, y son necesarias quienes soñaron en un barquito que podían derrotar la tiranía de Batista; quien dijeron ¡ya basta¡ y se enfrentaron con palos y con dignidad al tsunami neoliberal, y nos enseñaron la diferencia entre el tiempo largo y el tiempo corto, entre tomar el poder (o el gobierno) y transformar las asimetrías de poder, entre estar arriba y a la izquierda, o estar abajo y a la izquierda.

Por último, el cuarto aprendizaje del proceso cubano y zapatista es que la revolución será internacional, o no será. No hay izquierda si no es internacionalista, si no entiende su lucha unida a todas las demás. Desde el comienzo así lo hicieron explícito tanto la revolución cubana –donde ese compromiso no ha cejado ni un solo minuto, desde formas muy diferentes- como los y las zapatistas, empeñadas en encuentros intergalácticos, abiertos e inclusivos hasta con los habitantes de Plutón, si los hubiera.

Así, radicalidad, nuevas formas políticas, nuevos contenidos, osadía e internacionalismo. Eso nos dicen Cuba y Chiapas, desde lugares muy diferentes, desde evoluciones muy diferentes también, pero unidos en nuestra historia, en la historia de la izquierda, en el futuro de la izquierda. Por supuesto, y como ya hemos dicho, pasado, presente y futuro están en permanente tensión. Es necesario asumir aciertos, asumir errores, asumir nuevos tiempos, desde la honestidad y desde la franqueza, si queremos plantear estrategias acertadas.

No todo sirve, no todo vale. En este sentido, tan irritante es, por ejemplo, quien expulsa a Marx al basurero del olvido –sin reconocer su genialidad a la hora de interpretar el funcionamiento del capitalismo y su matriz excluyente y explotadora-, como quien lo convierte en deidad única, sin asumir la relevancia política actual del feminismo, el ecologismo, la democracia radical o en anticolonialismo a la hora de construir las agendas emancipatorias.

En todo caso, y más allá de la opinión que tengamos cada quién de cada proceso, de cuál sea lo que aprendamos en cada caso, nunca debemos olvidar la imagen del Fidel Castro en su discurso en el Parque Céspedes, de Santiago de Cuba, aquél primero de enero de 1959; ni la de Camilo Cienfuegos y el Ché Guevara camino de la Habana, ese mismo día, tras la victoria en Santa Clara; ni la imagen de la Comandanta Ramona tomando las cabeceras municipales de Chiapas, reclamando que la tierra es para quien la trabaja, y que ya basta de opresiones. Fidel, Camilo, Ché, Ramona, no sois nuestro pasado, sois nuestro futuro. Ese mismo futuro del que han vuelto a hablar los y las zapatistas al volver al volver a tomar hace unos días las cabeceras municipales, lanzándonos un mensaje fundamental: “A quien corresponda. ¿Escucharon? Es el sonido de su mundo derrumbándose. Es el del nuestro resurgiendo. El día que fue el día, era noche. Y noche será el día que será el día”. 

http://alternatiba.net/old-files/zapatistas.jpg

Sahara, memoria contra el olvido

Gonzalo Fernández Ortiz de Zárate – Mesa Internacionalista de Alternatiba

El pasado 10 de diciembre, día internacional de los derechos humanos, el Instituto Hegoa de la UPV/EHU y Euskal Fondoa presentaron en Donostia el Oasis de la Memoria. Se trata de un informe que recoge el trabajo de más de año y medio de recopilación de datos y de testimonios sobre la sistemática violencia ejercida por el Reino de Marruecos sobre el pueblo saharaui durante casi cuatro décadas.

El valor del documento reside en tres aspectos fundamentales: el primero es el período cubierto por el Informe, que parte desde el bombardeo de Um Dreiga en 1976 -que obligó a la población huida al desierto a internarse definitivamente en Argelia- y llega hasta el bombardeo de Gdem Izik, en noviembre de 2010. Por tanto, es un recorrido histórico completo, algo que nunca se había hecho hasta el momento.

El segundo aspecto que debe resaltarse es la cantidad y la calidad de los testimonios obtenidos -más de 260-, tanto en los campamentos en Argelia como en las complejas condiciones del Sahara Occidental ocupado. Este alto número permite constatar los muy variados tipos de conculcación de derechos humanos perpetrados por Marruecos. Así, en Informe se denuncian bombardeos, asesinatos, torturas, violencia sexual, pillajes, desplazamientos forzados, detenciones arbitrarias, etc.

En este sentido se explicita la voluntad de Marruecos por ejercer la mayor violencia posible sobre las mujeres y hombres saharauis, con el ánimo de ahogar sus legítimos derechos de justicia y autodeterminación. También se explicita que esta estrategia, aunque varió, sigue vigente aún después del alto el fuego de 1991.

Por último, el tercer aspecto significativo es que el Oasis de la Memoria está elaborado según los estándares internacionales de este tipo de documentos, y por tanto puede y debe ser utilizada como herramienta política y jurídica para denunciar lo que ya se sabía pero no se había sistematizado, así como para situar este conflicto olvidado en el centro de la agenda internacional, sacándolo del olvido cómplice en el que se encuentra en la actualidad.

Porque precisamente si este documento tiene un gran valor es el de reconocer que el conflicto entre Marruecos y Sahara es uno de los procesos de descolonización no resueltos -como el palestino, por ejemplo-. A su vez, el Oasis de la memoria demuestra el uso sistemático de violencia con total impunidad, y en base a unas enormes asimetrías de poder entre perpetradores y víctimas.

De esta manera, y ante las pruebas presentadas por el Informe, los países y estamentos que permiten esa impunidad, así como los que no asumen sus responsabilidades históricas, deberán retratarse.

¿Qué dirá el Reino de España, constatándose la violencia ejercida por Marruecos frente a una población que abandonó a su suerte hace 37 años, frente a un poderoso país sediento de los recursos naturales saharauis? ¿No debería asumir su responsabilidad como fuerza colonizadora inicial y ofrecer una salida democrática a las legítimas aspiraciones saharauis?

¿Qué dirán Francia y Estados Unidos, aliados históricos de Marruecos, ante las evidencias presentadas por el Informe, que por ejemplo sitúan el ratio de población desaparecida más alto respecto a cualquier conflicto -por encima del 2 por 1.000-, o que ha ensayado formas nuevas de horror, como por ejemplo las personas detenidas-desaparecidas por más de 15 años? ¿Qué dirá la comunidad Internacional, en general, ante la imagen en el espejo que les devuelve este Informe?

Es momento de una solución democrática. Es momento de una implicación decidida de la comunidad internacional en la resolución del conflicto. Es momento de un reconocimiento del dolor infligido. Es momento de la verdad, de la justicia, y de la reparación. Es tiempo, también, de la dignidad de las víctimas. Y es tiempo, sobre todo, de la dignidad de un pueblo luchador que nunca hinca la rodilla. ¡Autodeterminación para el Sahara, ya!

Alternatiba denuncia la represión paramiliar que sufre el campesinado colombiano tras reunirse con representantes de ASOCOL

El portavoz de Alternatiba, Oskar Matute, y el miembro de la Coordinadora Nacional de Alternatiba, Asier Vega, se han reunido hoy con Fredy Rodríguez Corrales, líder de la Asociación Colombiana (ASOCOL) y con David Uribe Laverde, abogado de la Coordinadora Nacional Campesina y representante legal de aquella comunidad, para denunciar el sufrimiento, la violencia y el terror que sufren las campesinas y los campesinos colombianos a manos de los paramilitares.

Matute y Vega han expresado su preocupación ante la “amarga situación”, y es por ello que denuncian rotundamente el arrebatamiento violento de sus tierras que sufrieron más de 600 familias de la Hacienda de Bellacruz, ahora conocida como Hacienda la Gloria. Los líderes de ASOCOL, que también han sufrido graves amenazas y persecución por parte de los paramilitares, abanderan el proceso de restitución de las tierras ilegalmente apropiadas con el apoyo de 96 familias que conforman la asociación.

Rodríguez y Uribe, que iniciaron este mes en Bruselas una gira europea de reuniones con eurodiputados, altos funcionarios comunitarios y representantes de varios países europeos, trabajan con el objetivo de conseguir el apoyo de varios países que exijan al Gobierno de Colombia un proceso de pacificación inmediato y, por consiguiente, una total restitución de las tierras arrebatadas a sus legítimos propietarios a través de la violencia. A su vez, también piden que le soliciten al Estado colombiano que brinde “protección efectiva a las y los campesinos para que retornen a las tierras de las que fueron expulsados injustamente”, y para que puedan ponerlas a producir en bien de sus comunidades.

Hoy por hoy, han asegurado, “es imposible revertir todos los daños causados a los campesinos y campesinas de Bellacruz, pero desde ASOCOL y Alternatiba solicitamos al Gobierno y a las Farc ahora que hablarán en La Habana de tierras y territorios, tengan en cuenta que las víctimas exigen justicia, reparación y verdad, porque la restitución de sus tierras es un requisito imprescindible para la paz. Sin ella, la paz se podrá firmar pero no será real”.

http://alternatiba.net/old-files/P1020124.JPG

http://alternatiba.net/old-files/P1020138.JPG

http://alternatiba.net/old-files/P1020143.JPG

http://alternatiba.net/old-files/P1020124.JPG

http://alternatiba.net/old-files/P1020138.JPG

http://alternatiba.net/old-files/P1020143.JPG

Alternatiba felicita a la izquierda soberanista de Catalunya y celebra la entrada de la CUP en el Parlament

La Coordinadora Nacional de Alternatiba ha querido trasladar su felicitación a los diferentes partidos de la izquierda soberanista de Catalunya por los resultados obtenidos en las elecciones al Parlament celebradas ayer domingo. Desde el órgano ejecutivo de la formación de izquierdas han subrayado el fuerte crecimiento de las fuerzas que entienden la construcción nacional acompañada de una construcción social, que ejerza la soberanía para dar la palabra al pueblo y no para gobernar con diferente bandera pero a las órdenes de los mismos poderes financieros y de espaldas a la ciudadanía.

Por otro lado, Alternatiba ha celebrado especialmente la irrupción en el Parlament de la Candidatura d’Unitat Popular Alternativa d’Esquerres, CUP, con 3 escaños y más de 126.000 votos. Alternatiba, que ha sido invitada a intervenir en varios mítines electorales de la CUP junto con David Fernández y otros cabezas de lista en los últimos días de campaña, ha comprobado de primera mano la gran labor realizada desde la militancia y desde las estructuras municipales de la CUP, un trabajo que ha convertido a esta candidatura de unidad popular en un referente de aquellas personas que consideran indisolubles la liberación nacional y la liberación social, que luchan por igual contra el capitalismo, el patriarcado, el desarrollismo, la falsa democracia y contra el racismo; y que ven en las instituciones no un fin, sino un medio para alzar la voz de las clases populares y denunciar las contradicciones y las corruptelas de quiénes suplantan -más que representar- la voluntad de la ciudadanía.

Es por todo esto por lo que desde Alternatiba han felicitado especialmente a la CUP por el gran resultado obtenido, y han deseado que sigan ampliando las bases de una apuesta que parte de las bases populares que pretenden cambiar el sistema y construir tanto una Catalunya como unos Paisos Catalanas soberanos y socialistas, y hacerlo desde abajo y desde la izquierda.

X