Alternatiba exige a Madrid que atienda las sentencias de Estrasburgo y de un giro de 180 grados en su política punitiva contra Euskal Herria

La portavoz de Alternatiba, Amaia Agirresarobe, se ha congratulado por la sentencia del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo dada a conocer hoy y que condena al Reino de España por no haber investigado las denuncias de torturas sufridas y denunciadas en 2003 por el aquel entonces director del diario Euskaldunon Egunkaria Martxelo Otamendi durante la “operación represiva” en la que cerraron este diario por orden encubierta del ministerio del interior.

Agirresarobe ha recordado que Madrid acumula ya miles de denuncias y docenas de sentencias que “dejan en evidencia sus reiteradas vulneraciones de los derechos humanos, así como su escasa calidad democrática”. Buena prueba de ello, ha añadido, fue “este atropello contra Euskal Herria y el derecho a recibir información en su lengua de cientos de miles de euskaldunes, en base a un proceso sin la menor base legal que, para colmo, el Gobierno de Aznar calificó de acción en defensa de la cultura vasca y el euskera”.

La portavoz de la formación de izquierdas también ha querido subrayar el “deleznable montaje político, judicial y mediático que desencadenó la clausura de Egunkaria –por aquel entonces único diario editado íntegramente en euskera- y la detención, incomunicación y vejación de varios de sus responsables. Entre ellos, el propio Otamendi, quién agotó las vías legales hasta acudir, finalmente, a Estrasburgo en el 2008.

Para Agirresarbe, es “evidente” la permanencia de una política represiva y vengativa por parte de los sucesivos gobiernos españoles, que “politizan e instrumentalizan la justicia sin el menor reparo”. Por eso, le ha exigido a Madrid que atienda las sentencias de Estrasburgo y las denuncias de entidades tan poco sospechosas de complicidad como Amnistía Internacional e incluso la ONU, y “que de por tanto un giro de 180 grados en la política punitiva que mantiene contra Euskal Herria”.

Alternatiba, EA, Aralar e Izquierda Abertzale exigen la dimisión de Ares y la apertura de un debate sobre el modelo policial

En representación de Eusko Alkartasuna, Alternatiba, Aralar y la Izquierda Abertzale, queremos manifestar que un mes después de la muerte del joven Iñigo Cabacas como consecuencia de un pelotazo lanzado por la Ertzaintza, el consejero Rodolfo Ares, como máximo responsable del Departamento de Interior del Gobierno Vasco, sigue sin esclarecer los hechos acaecidos el pasado 5 de abril y sin adoptar ni una sola medida que demuestre que asume realmente la responsabilidad política de lo sucedido.

Lamentamos comprobar que las declaraciones realizadas en el sentido de reflexionar sobre el actual modelo de Policía Autonómica y su adecuación al nuevo tiempo han quedado en meras declaraciones de intenciones realizadas para hacer frente al enorme malestar social que produjo la muerte de Iñigo.

Así lo demostró la actitud del consejero Ares en su comparecencia para explicar la carga en la que resultó gravemente herido Xuban Nafarrate, ya que se limitó a hacer apología de un modelo policial que había reconocido superado. La memoria de Iñigo Cabacas, sus familiares y amistades, la ciudadanía de Bilbo y la sociedad vasca en general se merecen una actitud más responsable del máximo dirigente de Interior.

Ares intenta justificar la actuación de los policías a sus órdenes en dos casos, el de Iñigo y el de Xuban, en los que existen testimonios y pruebas suficientes para echar por tierra la versión con la que el Departamento de Interior sigue intentado justificar las cargas que realizaron. Una actuación, además, realizada con material que la propia Unión Europea desaconseja por su capacidad para causar daños irreparables.

Cientos de ciudadanos y ciudadanas vascas han sido testigos directos y victimas de actuaciones desmedidas y de sus graves consecuencias. Sin embargo, el anuncio de Ares de fortalecer la Brigada Móvil, lejos de aportar soluciones profundiza en el modelo policial actual, destinado a convertir en delito y reprimir la protesta social.

El Gobierno vasco ha tratado de encubrir responsabilidades y evitar de esta manera un debate de fondo que la sociedad vasca tiene pendiente sobre el modelo policial que necesitamos de cara al futuro ycuya función sea la salvaguarda de la seguridad ciudadana, desterrando cualquier tipo de violencia policial o represión.

Por eso reiteramos nuestra exigencia de dar cauce a un debate social y político entorno al modelo policial; a un debate real sobre un modelo policial que se ajuste a los nuevos tiempos políticos que vivimos hoy en Euskal Herriay superar este modelo de policía represiva.

Finalmente desde Eusko Alkartasuna, Alternatiba, Aralar y la Izquierda Abertzale, queremos interpelar a los responsables políticos a que actúen en consecuencia y respondan a la petición de la gran mayoría de la ciudadanía, por lo que volvemos a exigir la dimisión o el cese del señor Ares.

Garantes de nuestra inseguridad

Igor Nabarro – Mesa de Pacificación y normalización de Alternatiba

El anuncio del cese definitivo de la actividad armada por partede ETA, el pasado mes de octubre, fue la señal inequívoca de que se estaban abriendo nuevas expectativas para Euskal Herria y sus habitantes. La sociedad vasca es optimista y ve, cada vez con más claridad, que el conflicto político se aproxima a la época del entendimiento, del diálogo, de la normalización política y de la paz.

La inmensa mayoría de Euskal Herria se asoma a este nuevo futuro con la mirada repleta de esperanza y de ilusión, sabedora de que lo acontecido en los últimos 12 meses ha sido un punto de inflexión que no tiene vuelta atrás. Este ambiente se respira en las calles, se respira incluso en los momentos de reivindicación social y política, como el vivido en el Aberri Eguna, en el que el clima de distensión era palpable en las calles de Iruña.

Pero al parecer, no todo el mundo está siendo capaz de asimilar y de adaptarse a este nuevo tiempo. Parece mentira, pero están siendo aquellos que más alto clamaban, y quienes podría parecer que más interés tenían en que la violencia desapareciese de las calles, quienes están continuamente poniendo palos en las ruedas tratando de que la caravana de la normalización descarrile. Parece que están deseando la vuelta a tiempos pasados.

El final de la violencia de ETA, la desaparición de la kale borroka, el clima de distensión en las reivindicaciones al que hacía referencia, parece haberle sentado muy mal a los cuerpos represivos del Estado, especialmente a la policía autonómica vasca, lo cual para algunas personas es lo más sorprendente y para otras, en cambio, no sorprende en absoluto.

Parece mentira, pero da la impresión de que ni los agentes de la policía autonómica, ni sus mandos, ni la clase política que les dirige tienen en absoluto idea de lo que significa el nombre oficial del cuerpo de policía: Ertzaintza, Herri zaintza. Son quienes deben velar por el bienestar de los habitantes de nuestro país, son quienes deben garantizar que las personas que habitan en nuestros pueblos y ciudades se sientan seguras de salir a la calle porque saben que no van a ser víctimas de agresiones y de ataques injustificados.

La Ertzaintza debería ser la principal imagen de este nuevo tiempo. Un cuerpo que de policial pasase a ser el icono de la colaboración de las instituciones con la ciudadanía. Deberíamos sentirnos seguros y seguras cada vez que pasáramos delante de cualquier agente, deberíamos sentirnos agradecidos y agradecidas de tenerles ahí, sabiendo que están para ayudarnos en lo que necesitemos.

En cambio, la policía autonómica vasca ha aumentado en pocos meses su nivel de brutalidad de forma exponencial. Las actuaciones del 3 marzo en Gasteiz, las cargas policiales durante el día de huelga general del pasado 29 marzo, la agresión al joven Xuban Nafarrate que le provocó traumatismo craneoencefálico y la represión de la que fueron objeto las concentraciones para denunciar este hecho, son episodios de una cadena de actos violentos desmedidos protagonizados por la Ertzaintza, que han ido in crescendo y que como no podía ser de otra manera,  han desembocado en la muerte de Iñigo Cabacas, tras recibir un pelotazo de las fuerzas antidisturbios.

Da la impresión de que están rabiosos, esperando la más mínima oportunidad para actuar con la mayor fuerza posible, de un modo desmedido y desbocado, como si su única razón de ser fuese la represión y les molestase la nueva situación social y política…

No están sabiendo adaptarse a los vientos de cambio, pero los dirigentes políticos, bajo los cuales está la responsabilidad de las fuerzas de seguridad, tampoco han querido, darles las pertinentes pautas e instrucciones para su reconversión.

El Sr. Rodolfo Ares, desde su responsabilidad como consejero de interior del Gobierno Vasco, no ha sabido gestionar la nueva situación en la que se encuentra la policía autónoma vasca y es por esto que se le puede considerar el responsable político directo de la muerte de Iñigo y del resto de actuaciones desmedidas de la Ertzaintza. Por esto mismo el señor Ares debe presentar su inmediata dimisión, pero no diciendo aquello de «yo asumo toda la responsabilidad», porque no es cierto.

El Gobierno Vasco en su conjunto es responsable de esta situación, la policía autónoma vasca como institución es responsable de lo sucedido, aquellos que han estado dando las órdenes durante estos meses son también responsables y por supuesto, son responsables quienes las cumplieron y actuaron de forma tan brutal.

Todas esas personas deben asumir su responsabilidad, someterse a la justicia y abandonar sus puestos ya que no están cumpliendo con las obligaciones de sus cargos. Hoy debemos decir, con más convencimiento si cabe, que no son los defensores del pueblo, son sus agresores.

Izquierda abertzale, EA, Aralar y Alternatiba reclaman la dimisión de Ares, «responsable político» de la muerte de Cabacas

En primer lugar, los aquí reunidos, en nombre de las fuerzas políticas que representamos, queremos mostrar nuestra entera solidaridad hacía los familiares y amigos del joven Iñigo Cabacas.

Iñigo Cabacas es la última victima de la cruda violencia policial que nuestro país vienen sufriendo las ultimas decadas. Violencia policial justificada y amparada por el andamiaje de medidas represivas y de excepción construido para evitar una situación de normalidad y democracia en nuestro país.

Sin embargo, a ojos de la sociedad, nos encontramos ante una violencia policial totalmente desproporcionada y absolutamente injustificable. Y es que, aunque desde instancias oficiales se pretendan ocultar y manipular los hechos, la muerte de Iñigo Cabacas no es un hecho aislado. El jueves anterior, la Ertzaintza agredía brutalmente al joven Xuban Nafarrate en Gasteiz. Este joven tuvo que ser ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos con derrame cerebral.

A la semana era el joven Iñigo Cabacas el que recibía un pelotazo de la Ertzaintza en la cabeza, permaneciendo en coma hasta que hoy se ha certificado su fallecimiento.

Ante estos hechos, Eusko Alkartasuna, Alternatiba, Aralar y la Izquierda Abertzale queremos realizar las siguientes reflexiones:

o Consideramos absolutamente grave que las diversas policías que operan en nuestro país empleen la violencia contra la ciudadanía vasca de forma absolutamente impune.

o Consideramos que la violencia policial no se debe a elementos aislados sino que responde a una estrategia política que pretende abortar las esperanzas de paz y soluciones de la ciudadanía vasca. No hay más que constatar que en los últimos meses se han multiplicado las actuaciones violentas, persecuciones o controles de carretera de las diversas policías.

o Llamamos a las diversas fuerzas policiales a que dejen de utilizar materiales de guerra, como las pelotas de goma, que han provoca diversas muertes y decenas de heridos.

o Exigimos la inmediata dimisión del responsable político último de la Ertzaintza, el Consejero de Interior Rodolfo Ares. Ares es el responsable político de la muerte de Iñigo Cabacas.

o Del mismo modo, consideramos extremadamente preocupante que a día de hoy no se haya dado ninguna explicación oficial acerca de lo ocurrido el 29 de marzo en Gasteiz ni el pasado jueves en Bilbo.

o Exigimos la inmediata investigación y depuración de responsabilidades entre los policías implicados en las últimas actuaciones policiales que han derivado en heridos muy graves o fallecidos. La sociedad vasca esta harta da que los implicados en la represión gocen de total impunidad.

o Por ultimo, queremos criticar el lamentable tratamiento que ETB ha ofrecido a la muerte de Iñigo Cabacas. Observamos una intención política de la televisión dirigida por Alberto Surio de restar gravedad al asunto y realizar el trabajo sucio a Rodolfo Ares.

Para finalizar, las cuatro formaciones políticas aquí presentes queremos mostrar nuestra adhesión a los actos que se puedan convocar para denunciar la muerte de Iñigo Cabacas y como muestra de solidaridad para con sus familiares y amigos. Del mismo modo, llamamos a la ciudadanía a que participe en los mismos.

No se puede esperar más, urge un cambio en la política penitenciaria

Maribi Ugarteburu, Dani Maeztu, Ikerne Badiola, Oskar Matute, Pello Urizar, Amaia Agirresarobe, Pernando Barrena.

Resulta evidente que nos encontramos en un nuevo tiempo. Un tiempo que todos y todas coincidimos en señalar como positivo y esperanzador. Sin embargo, pese a esta constatación, seguimos asistiendo a una rigidez en la puesta en marcha de nuevos pasos y medidas. Esta rigidez puede sembrar de desilusión, con las dificultades que eso conlleva, los vientos de paz, convivencia y libertad que la ciudadanía vasca de forma abrumadora espera que se asienten definitiva y permanentemente entre nosotros y nosotras. Es por ello, que nos animamos a firmar esta reflexión, esta petición. En el ánimo de que no caiga en saco roto. De que sus destinatarios, aquellos que determinan qué política penitenciaria se ha de aplicar para con las presas y presos políticos vascos entiendan que detrás de esta demanda viene una demanda apoyada de forma mayoritaria por la plural y diversa sociedad vasca.

Y es de la política penitenciaria de la que queremos dejar por escrito nuestra posición y nuestra petición. No ayuda, no humaniza, no contribuye sostener en pie una política penitenciaria que obedece a otro tiempo, a otra lectura, a otra fase felizmente superada por la sociedad vasca.

El sostenimiento de una legislación que posibilita medidas de excepción como mantener en prisión a quien ya tiene la condena cumplida por medio de la doctrina 197/2006, la negativa a la excarcelación de presas y presos que padecen graves enfermedades y el mantenimiento de la política de dispersión, por citar tan solo algunos de todos los aspectos que vertebran la actual política penitenciaria, son un castigo que ya apenas entiende nadie en nuestro país, sea cual fuera su adscripción o simpatía política.

Pero no hablamos solo de datos o de medidas más o menos etéreas o intangibles. Estamos hablando de la inexplicable situación que mantiene en prisión a personas con nombre y apellidos. Estas personas están viendo en riesgo sus propias vidas por la aplicación de una política penitenciaria que debe ser modificada. Entre éstas hay quienes padecen graves enfermedades, con diferentes patologías, muchas de ellas adquiridas o agravadas hasta el extremo durante su reclusión, que permanecen en prisión en contra del criterio médico y la lógica más elemental.

Y queremos detenernos, sin olvidarnos del resto, en uno de estos casos, el del basauriarra Txus Martin. Su situación es extrema ya que su enfermedad de corte mental no puede ser tratada, ni es compatible con su reclusión ni un minuto más. Para un cuadro severo como el suyo, el aislamiento y la reclusión no son sino la forma más eficaz para lograr un desenlace fatal que nadie puede desear, sea cual fuere su afecto o desafecto hacia dicha persona y/o sus ideas.

Es por ello, que decimos que no cabe esperar más, que si las instituciones quieren ser representativas de la voluntad popular y garantes de los derechos de todos y cada uno de sus administrados y administradas, tienen que proceder a su inmediata puesta en libertad para proceder a administrarle el tratamiento y la terapia que la gravedad de su actual situación requiere.

Y aun cuando incidimos en el caso de Txus Martin, somos conscientes de que a todas estas personas, y otras muchas, su permanencia en prisión no solo les ha acarreado un agravamiento en sus dolencias y enfermedades, sino que junto a esto han tenido que soportar una inadecuada atención médica traducida en dificultades múltiples para hacer frente a los tratamientos que situaciones de tanta gravedad requerían.

No es el tiempo de la venganza. No es eso lo que nos demandan los ciudadanos y ciudadanas vascas. Es, por contra, el momento de la unilateralidad y de que todos y todas hagamos cuanto este en nuestras manos y en el desempeño de nuestras responsabilidades para afianzar un proceso de paz y normalización que supere las hondas y crueles heridas que nuestro pueblo ha venido soportando durante décadas y soporta aún hoy.

Nadie nos perdonará que pudiendo hacer más nos conformáramos con hacer lo justo, con callarnos o pasar de largo ante situaciones de excepcionalidad como las que, entre otras, hemos trasladado aquí. Cambiar la política penitenciaria no es asumir los postulados de parte, es contribuir a afianzar un bien colectivo: la paz.

Por último, queremos aprovechar este artículo para hacer un llamamiento a la sociedad en general para que participe en la movilización que mañana, 31 de marzo, se celebrará en Iruñea con el fin de solicitar la liberación de las y los presos que padecen graves enfermedades. Asimismo, recordamos que el 19 de mayo contamos con una inmejorable oportunidad para acumular fuerzas a favor de los derechos de las y los presos en las plazas de nuestras ciudades, barrios y pueblos.

Entrevista a Oskar Matute en Info: «El lehendakari ha perdido una nueva oportunidad de distanciarse del PP»

En opinión del portavoz de Alternatiba Oskar Matute, Patxi Lopez ha defraudado con su intervención del jueves pasado y ha afirmado que el PSE “perdió una gran oportunidad para marcar distancias” con respecto al discurso inmovilista del Partido Popular. También ha valorado positivamente que la huelga general en hego Euskal Herria cuente con el respaldo de todos los sindicatos y ha agregado que el “soberanismo de izquierdas debe ofrecer una alternativa real” ante la crisis capitalista.

 

http://www.info7.com/2012/03/12/oscar-matute-el-lehendakari-ha-perdido-una-nueva-oportunidad-de-distanciarse-del-ppi/

Alternatiba considera inaplazable la derogación de la ley de partidos y el fin de la política penitenciaria de castigo

Desde Alternatiba consideramos que el anuncio del cese de la actividad armada por parte de ETA ha supuesto un hito, a estas alturas ya incuestionable, para la resolución del conflicto vasco, por ser un primer paso imprescindible para la construcción de un escenario de libertad y respeto a todos los derechos de todas las personas de este país.

Queremos subrayar el papel protagonista de la ciudadanía vasca, que más allá de las declaraciones de agentes políticos, más allá de las tutelas que desde uno y otro lado se le han querido imponer, ha sabido caminar en la dirección adecuada; cuando ha salido a la calle a denunciar violencias y vulneraciones de derechos de todo tipo o cuando ha acudido a las urnas para expresarse democráticamente aún cuando las cortapisas en forma de ilegalizaciones o de amenazas eran constantes.

La inmensa mayoría de las mujeres y los hombres de este pueblo han demandado la paz, y hoy la paz está más cerca que nunca. Alternatiba siempre ha denunciado las tutelas que sobre este pueblo se han querido ejercer. El comunicado difundido hace ya una semana elimina una de esas tutelas, y son, somos, los agentes políticos y sociales los que tenemos que trabajar ahora para superar el resto: nadie debe imponer a la ciudadanía a quién no debe votar eliminando opciones políticas y secuestrando a sus líderes, porque eso y no otra cosa es lo que estan haciendo con Arnaldo Otegi, Rafa Diez, Sonia Jacinto, Arkaitz Rodriguez y Miren Zabaleta; nadie debe decidir por este pueblo cual es la configuración en la que construir su futuro y nadie puede arrogarse representar la voluntad de una sociedad diversa y plural.

Alternatiba celebra el cambio de lenguaje que se ha producido en gran parte de la clase política, tanto de Euskal Herria como del Reino de España, ya que en pocos días han pasado de negarse a ser partícipes de la resolución del conflicto a querer erigirse en profetas del mismo. Frente a los que llevamos mucho tiempo contribuyendo en la medida en que hemos podido y valorando positívamente cada nuevo paso en el proceso, la sociedad ha tenido que ver como representantes institucionales ninguneaban, cuando no insultaban, la labor de agentes tanto locales como internacionales; como algunos agentes reaccionarios seguían solicitando ayer la ilegalización de la coalición electoral con la que Alternatiba concurre a las elecciones del 20 de noviembre o como la máxima representación foral de Bizkaia teatralizaba el advenimiento de la paz como si el conflicto político que vive este pueblo no requiriera de más gestos para su superación real y efectiva, como si el hecho de retirar una pancarta resolviera las graves vulneraciones de derechos que aún perduran o resolviera de un día para otro el desafío de la reconciliación y la convivencia.

Queremos finalizar realizando un nuevo llamamiento a los gobiernos español y francés a dar cuantos pasos sean necesarios para abrir una negociación en los términos establecidos por la resolución de la Conferencia Internacional de Donostia. Instamos particularmente al Gobierno de Madrid a que no aplace los pasos que pueden impulsar la oportunidad histórica que tenemos en frente, como la derogación de la ley de partidos o el fin de una política penitenciaria que castiga doblemente a los presos y a sus familias; y no solo lo pedimos porque Alternatiba considera inaplazable la restitución de los derechos de toda la ciudadanía vasca, sino porque los que se empeñen en entorpecer quedarán descolocados ante la ciudadanía y ante la historia, porque la superación de la violencia es una conquista social que no se puede parar ni obstaculizar eternamente.

Alternatiba llama a la ciudadanía vasca a llenar mañana las calles de Bilbao y convertirse en agentes activos de la paz

Larunbatean, Bilbon Alternatiba ha realizado hoy un llamamiento a todos los hombres y mujeres de Euskal Herria a participar en la manifestación convocada por los firmantes del Acuerdo de Gernika que recorrerá mañana las calles de Bilbao bajo el lema “Euskal Herriak konponbidea nahi du” (Euskal Herria quiere una solución), para convertirse, en palabras del portavoz de Alternatiba Oskar Matute, en “agentes activos de la paz”. Tras el comunicado de ETA en el que anuncia el cese definitivo de su actividad armada, Matute ha subrayado que “la sociedad no puede ser mera espectadora de los acontecimientos, porque la reconciliación, la convivencia y la paz deben ser fruto del trabajo en común de toda la ciudadanía, con implicación especial de mujeres y jóvenes”.

Alternatiba estará ampliamente representada en la manifestación de mañana; acudirán, entre otros, la juntera por Gipuzkoa Begoña Vesga, el juntero de Bizkaia Asier Vega, el canditado al senado por Bizkaia Jonathan Martinez y el portavoz de Alternatiba, Oskar Matute

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