Hace casi un año, miles de mujeres nos concentrábamos aquí y en las plazas y las calles de este país. Nos unía un sentimiento y una reivindicación de igualdad, de avanzar en la construcción de una sociedad igualitaria. Nos unía un sentimiento de ser ciudadanas de segunda, de que no se respetan nuestros derechos. Nos unía un deseo de construir una sociedad y un país mejor para nosotras y para las generaciones futuras. Lo que ocurrió aquí el año pasado lo recordaremos durante mucho tiempo. Fue un ejemplo de movilización, de reivindicación, de unión.
Ese sentimiento que se reflejó con más fuerza que nunca el año pasado se volverá a ver el próximo 8 de marzo. Porque el problema estructural de esta sociedad sigue sin resolverse. Y porque se ciernen nuevas amenazas que debemos saber calibrar y responder de una manera eficiente. La ola de autoritarismo que recorre el mundo, Europa – y como no, también el Estado español- es una clara amenaza para los derechos que hemos conseguido en generaciones mediante la lucha en las calles, en los centros de trabajo, en las instituciones… Y uno de los pilares en los que se fundamenta esa ola antidemocrática y autoritaria que nos quiere hacer retroceder décadas somos nosotras, las mujeres. Nos quieren en casa, sin derechos. Nos quieren más ciudadanas de segunda de lo que ya somos ahora. Pero que lo tengan claro: no lo vamos a permitir y vamos a saber responderles como se merecen.
La huelga feminista convocada para el próximo 8 de marzo por el movimiento feminista de este país es una gran oportunidad para ello que nadie dude que vamos a saber aprovechar. Las mujeres de Alternatiba y EH Bildu vamos a ser un agente activo en esa jornada de huelga. Nosotras paramos en nuestra actividad política ordinaria diaria, pero junto a las miles y miles de mujeres que el 8 de marzo van a parar, vamos a ser agentes que trabajen, impulsen y luchen por construir un país y una sociedad igualitaria, donde el ser mujer no sea una condición para ser inferiores.
Pero somos muy conscientes que la lucha por la igualdad y por la construcción de una sociedad más justa se tiene que realizar todos los días y en todos los ámbitos. Por eso nos implicamos a diario en las instituciones. Porque a pesar de las limitaciones a las que tenemos que enfrentarnos, tenemos propuestas para mejorar la vida de las mujeres y de todas las personas. Propuestas para acabar con la brecha salarial, para hacer frente a la violencia sexista, para mejorar la conciliación familiar…
No es fácil avanzar al ritmo que desearíamos, ya que a la dificultad de sumar mayorías políticas suficientes para el poder implementar otro tipo de políticas que amparen los derechos de las mujeres, nos encontramos con las trabas impuestas por el marco político e institucional centralista y español que nos impide contar con las herramientas necesarias para avanzar en la dirección correcta. Como mujeres feministas, soberanistas y de izquierdas también seguiremos trabajando para la consecución de un nuevo estatus para nuestro país que nos permita implementar las políticas que desea la mayoría social y política de este país, también en todo lo referente a las reclamaciones que durante décadas viene realizando el movimiento feminista y que cuentan con un gran respaldo social en nuestro país.
Por todo ello, porque creemos en un país y una sociedad igualitaria, libre de autoritarismos de toda clase, fundamentado en la justicia social y sin ciudadanas de segunda, el 8 de marzo las mujeres de Alternatiba y EH Bildu se sumarán a la huelga feminista y serán un parte activa para la consecución e implementación de las reivindicaciones estarán en las calles ese día.
