Opresores patriarcales y lacayas del sistema

Irantzu Varela

Me parto. Me río por no llorar -o ponerme violenta- cada vez que alguien trata de convencerme de que ya hemos alcanzado la igualdad, de que las reivindicaciones feministas ya se han conseguido y que, a nada que seas un poco espabilada y pongas de tu parte, puedes ir por la vida de ciudadana de primera, y pedir que te traten como a la gente. Osea, como a un hombre.

Las mujeres asesinadas y torturadas por los hombres que decían quererlas, las que son agredidas en la calle por desconocidos, el 24% menos que cobramos en Euskal Herria por cada hora de empleo y el evidente desequilibrio en el trabajo reproductivo y de cuidados, deberían ser suficientes para que nadie tenga la desfachatez, la ignorancia y la irresponsabilidad política de decir que vivimos en igualdad. Pero no es así. En los espacios públicos y en las organizaciones políticas aparecen voces que se escandalizan con las cifras, que programan y prometen cambios en el reparto de las ayudas o parches urgentes a situaciones coyunturales, pero ninguna organización política ha tenido la valentía y la coherencia como para asumir que vivimos en un sistema de dominación doble, que se basa en convencer a los pobres de que están a un paso de dejar de serlo y a las mujeres de que son personas, como ellos.

Se han incorporado reivindicaciones feministas a las agendas políticas, se presentan en las listas candidatas significadas en el feminismo, se generan órganos en las estructuras que trabajan los asuntos generales desde una perspectiva feminista, pero no se asume de forma explícita, sin complejos y sin dar la sensación de estar haciendo concesiones a una minoría, el hecho de que la lucha contra el capitalismo será antipatriarcal o no será.

Ni se ha hecho el análisis ni se han planteado las estrategias. Si estamos en la izquierda, estamos en contra de los sistemas de dominación, de los privilegios y de las opresiones. Por eso somos anticapitalistas. Por eso tenemos que ser antipatriarcales. Porque el patriarcado es un sistema de dominación que se basa en que los hombres tengan privilegios a costa de los derechos de las mujeres, a las que oprime sistémica y sistemáticamente. Y quien no quiera enterarse, no sólo carece de profundidad -como dijo Rosa Luxemburgo- sino que vive cómodamente en un sistema en el que la mitad de la población oprime a la otra media. Es decir, o es un opresor patriarcal o una lacaya del sistema.

Así, mujeres y hombres y gentes que no queréis vivir en un sistema de dominación, que no queréis tener privilegios o que os roben vuestros derechos, que no queréis ser opresores ni vivir en un mundo con siervos, corred a apuntaros al feminismo.

Se puede leer, protestar, luchar, filosofar, aprender y buscar, pero se empieza por no negar lo cierto: el patriarcado y el capitalismo son dos sistemas paralelos, se necesitan, se alimentan, se reproducen y te permiten ser pobre, pero tener privilegios. Sólo tienes que ser un hombre.

Si no lo ves, no quieres renunciar a tus privilegios, o te gusta vivir con dueños.

Feminismo o barbarie.

Dejen que los cuerpos disfruten

Luis Salgado – Alternatiba
 
Nueva polémica en Gasteiz, en esta ocasión por culpa de la anunciada apertura de un centro de ocio para parejas liberales en el barrio de Salburua.
 
En el mes de enero los medios de comunicación alaveses se hicieron eco de la noticia, en Salburua van a inaugurar un local de ocio sexual, “Las puertas del cielo” se llamará, y claro, para seguir con la tradición de esta ciudad ya tenemos montado el circo. Decenas de vecinos de la torre donde se ubicará y  aledañas han mostrado su disconformidad con dicha apertura. Se están organizando en torno a reuniones y recogidas de firmas. Sus argumentos son de lo más variado, desde lo inadecuado de la ubicación cerca de un parque infantil, pasando por los ruidos y molestias que ocasionaran a los vecinos y viandantes. Vamos, nada nuevo bajo el sol. Quejas respetables y a tener en cuenta, sin duda, pero que esconden un total desconocimiento de la actividad, y por supuesto algo más ancestral, la reacción puritana ante cualquier cosa que destile o huela a sexo no normativo.
 
Los clubs de ocio sexual no son nada nuevo y vienen funcionando en el Reino desde la muerte del Dictador, aunque bien es cierto que escasean en nuestro entorno, ¡vaya usted a saber por qué! Y de esa forma en estos momentos tan solo Bizkaia cuenta con un local abierto al público y otro, muy cerquita, en Castro Urdiales, solo para socios. Obviando esos dos, el que quiera disfrutar de otras formas de entender el sexo tendrá que desplazarse hasta Baiona (1) Zaragoza (2) Valladolid (2) Oviedo (1) Xixón (2) o Madrid (6) el listado aumenta exponencialmente cuanto más avancemos hacia Levante o hacia el sur. Aunque por curiosidad diré que si Galicia tiene una imagen de tradición y conservadurismo extremo, al menos en este ámbito no parece así ya que poseen 5 locales entre A Coruña (2) Vigo (2) y Pontevedra (1) Quizá si tenía razón Vaya Semanita cuando hablaba del conflicto vasco.
 
A un club liberal acuden personas dispuestas a disfrutar de su sexualidad con mente abierta, en un entorno de libertad y con la seguridad de que en ese espacio nadie les va a juzgar ni a prejuzgar por sus gustos o prácticas, algo que SÍ harán normalmente en sus entornos cercanos. Ese es el motivo principal por el que los propios usuarios y dueños de los locales velan, y mucho, por la intimidad y la discreción. Los locales suelen disponer de un bar a la entrada, donde tomar una consumición tranquilamente mientras se charla con otros parroquianos, de acceso restringido a mayores de edad. No, no dista mucho de un pub cualquiera, nadie va desnudo, ni se producen escenas de sexo explícito sobre la barra, o al menos no muchas más de las que cualquiera puede observar un sábado a ciertas horas en los Pubs y Discotecas de la ciudad cuando el alcohol y la fiesta dan rienda suelta a la pasión. Yo diría que aún se ven menos, y con mayor gusto, por aquello de que el alcohol liga mal con las prácticas placenteras. Además, sino se quiere ver solo hay que hacer una cosa, no entrar, ya que estos locales no tienen grandes ventanales en pos, una vez más de la discreción. Es pasado el bar donde se suelen encontrar las zonas de ocio propiamente dichas, con estancias variadas generalmente insonorizadas. Les aseguro a los vecinos preocupados por el ruido que cualquier bar, pub, o degustación produce más ruidos, gritos y escándalo.
 
¿Cuáles son entonces los problemas que pueden producir a los vecinos? Quizá el principal sea que ellos y ellas sepan que ahí dentro las personas están disfrutando de sus cuerpos con total libertad, ya que ellos y ellas nunca se enterarán y se tendrán que limitar a fantasear con lo que ocurre o esperar a que alguien se lo cuente. O quizá, como me atrevo a deducir en el caso de al menos una pareja allí residente, es que son asiduos de otros locales cómo el Géminis, y tienen miedo de que un encuentro casual desvele al vecindario sus gustos. Por que si de lo que me quieren convencer es de que lo hacen por el bien de la infancia habría que preguntarse por qué nadie levantó la voz ante la apertura de un club de juego en una manzana adyacente en cuyo interior no es difícil encontrar a familias enteras tomando un pintxo un domingo al mediodía con niños ensimismados por las lucecitas de las máquinas tragaperras. O por qué permitimos que los niños y niñas correteen y jueguen en el interior de los bares, donde libremente las parejas se besan, y otros se alcoholizan. Quizás el problema mayor es que todavía no somos adultos y no hemos encontrado la forma de tratar con normalidad una faceta de nuestra vida, la sexual, y por eso nos ocultamos, nos encerramos y nos la callamos, mientras insultamos, amenazamos, golpeamos, delante de la infancia sin ningún pudor. Es mejor enseñar violencia que sexo, aunque esa criatura a la que crías, a la que quieres y a la que cuidas haya nacido de un acto húmedo, sucio y pecaminoso, de (mayoritariamente) una polla entrando y saliendo de un coño, así, con todas las letras.
 
Del blog de Luis Salgado El mundo imperfecto

Todo depende de Podemos, Bildu y el PSE

Enrique Martínez Flórez – Alternatiba

Me parece difícil, cuando no imposible extrapolar los resultados de unas elecciones a otras, diferentes, bien por su naturaleza o por razón de territorio. Y ello porque, es obvio, existen muchas diferencias derivadas de situaciones socioeconómicas y sobre todo de los diferentes sistemas de partidos en las distintos territorios. Ahora bien, examinar las propias diferencias y poner de relieve porqué los datos de unas elecciones, no sirven en otras ya es por sí mismo un ejercicio de análisis del que resultan consecuencias que, en definitiva parten de aquellos datos. Cuestión distinta es si el análisis es correcto y las consecuencias del mismo acertadas, el propio análisis, por mucho que queramos disfrazarlo de objetividad, siempre estará teñido de cierto subjetivismo.Intentaré acertar al poner de relieve las diferencias entre las autonómicas andaluzas y los siguientes procesos que nos toca vivir aquí.

La primera cuestión visible es que el Partido Socialista ha ganado. ¿Tiene consecuencias este triunfo para los socialistas de Euskal Herria?. Pues yo creo que sí, ha sido una inyección de moral para un grupo que estaba muy necesitado, por otro lado, Pedro Sánchez ya tiene un triunfo sobre el PP y consolida de momento, un liderazgo, al menos hasta las municipales y autonómicas, en las que un mal resultado, daría rienda suelta a aquellos por los que apueste Susana Díaz, sería el momento de Chacón o de Madina. Estos efectos beneficiosos ¿serán suficientes para aguantar, es decir, repetir resultado que es lo que ha supuesto el triunfo de Susana Díaz? Esto significa aguantar el tirón de Podemos. La medida de lo que aguante será determinante en el futuro de la política vasca. El pacto con el PNV dará a este Ayuntamientos y Diputaciones si los resultados del Partido Socialista, son parecidos a los que tiene, en caso contrario, si se desploma o no controla las pérdidas, al menos, el panorama se muestra muy abierto con la entrada de Podemos en las instituciones.

En Navarra la nueva formación lo ha dicho claro, pero la predicción se enturbia si consideramos que en Madrid Nafarroa siempre ha sido cuestión de Estado y el pacto de Podemos con los partidos de la coalición abertzale de izquierda requerirá un ejercicio de valor de la cúpula. En este caso y, por seguir con la referencia andaluza, el PNV es el Partido Socialista. Me explico. En Euskal Herria contamos con un partido que tiene un apoyo social firme, visceral e institucionalizado, son una masa de votantes a los que redes clientelares o episodios de corrupción como el recientemente conocido de Bidegi, no importan. Tampoco les importará a estos votantes que descabalguen a la lista de la izquierda abertzale mediante un pacto con los socialistas españoles, y eventualmente si fuera necesario con el PP. Es la misma situación que ocupa el PSOE en Andalucía y que le ha permitido ganar las elecciones pero necesitando de una muleta para resultar investido y dispuesto para ello a pactar con quien sea.

A la debacle popular en Andalucía es difícil encontrarle parangón, la caída es menos dura si ya se estaba abajo, de la situación actual a la irrelevancia no hay mucha diferencia. La única pregunta es saber si mantendrán su apuesta por la lista más votada, mucho me temo que no. De lo que resulta de Andalucía, lo único que me cabe decir es que en Euskadi, el juego depende de las combinaciones entre Podemos, Bildu y el Partido Socialista, y de la posterior postura de los primeros, aquí y en Madrid, porque si examinamos programas y trayectoria en los gobiernos, éstos no debían tener dudas.

Leer desde fuente

La excepción y la regla

Luis Salgado – Alternatiba
 
Bendita Internet que te permite saber si un programa merece la pena antes de su visionado y elegir cuando lo quieres ver. De ese modo me pude permitir ver en la tarde del domingo una entrevista realizada en Telecirco a Guillermo Toledo el día anterior. El actor, como siempre, desplegó su habitual valentía a la hora de encarar las preguntas malintencionadas y llamar a las cosas por su nombre. Se podrá estar más o menos de acuerdo con él, se podrá cuestionar sus argumentaciones, pero lo que nadie podrá poner en duda es que cree en lo que dice, y sobre todo lo siente, algo que no suele ser muy habitual en estos tiempos de hipocresía galopante y mentiras creativas para enmascarar realidades incómodas.
 
Con esos ingredientes y con el más que cuestionable nivel de los inquisidores de la más que cuestionable cadena televisiva, la entrevista resultó de lo más predecible. Tres tertulianos dispuestos a bombardear al actor, ninguneando sus argumentaciones y con el beneplácito de una presentadora hostil capaz de insinuar signos de locura en el entrevistado. Sin embargo el sumun del absurdo llegaría casi al final de la entrevista cuando Willy Toledo ponía en cuestión el modelo “democrático” estadounidense poniendo sobre la mesa cuestiones cómo la pena de muerte, el alto número de presos (un 25% de la población reclusa mundial cumple condena en los USA) y entre otros destacó la segregación racial que aún en pleno siglo XXI existe en aquellas latitudes. Y entonces, una de las tertulianas, Pilar Gómez, haciendo caso omiso al dicho de que “Más vale permanecer callado y parecer idiota que abrir la boca y despejar todas las dudas” soltó aquello de “¿Cómo va a ser EEUU un país racista? ¡Pero si tienen un presidente negro!” Pues mire Señora, en EEUU existe el racismo aunque tengan un presidente negro, igual que su España existe el machismo aunque tengamos alcaldesas, o presidentas de comunidades autónomas. Porque casi a diario nos desayunamos mujeres asesinadas. Porque en EEUU la mayoría de sus presos son afroamericanos. Porque esos afroamericanos tienen muy cuestionados sus derechos civiles, entre ellos el de voto. Porque son mayoría los afroamericanos asesinados en sillas eléctricas o con la inyección letal. Obama, muy Señora mía, no es sino una excepción, y cómo usted seguro que sabe la presencia de una excepción no hace sino confirmar la existencia de una regla.
 
Pero claro, no es casualidad que quienes defienden este Sistema utilicen las excepciones como máximas, ya que con ellas tratan de esconder esas reglas que de conocerlas seguramente provocarían que la mayoría de los mortales saltaran de su sofá y dejaran de pagarle el sueldo a este tipo de personajes. Sin embargo, existen esas reglas. Existe una que mandata que para ser rico hay que cumplir una serie de condiciones, cómo no nacer en la indigencia, aunque claro, el cine, los libros, los medios de comunicación, todos gustan de enseñarnos excepciones de personas “hechas a sí mismas”. Existe ese machismo estructural o patriarcado que limita el empoderamiento de la mujer, aunque nos quieran mostrar ciertas excepciones cómo ejemplo de su inexistencia y así, en una foto de una manifestación de presidentes europeos en París sólo había tres mujeres, eso sí, puestas en primera línea para que la foto no “cantase” en exceso. Existe aún una homofobia palpable dónde el ser trans-marica-bollo limitará tus opciones de aspirar a una vida en libertad, por mucho que se empeñen en colarnos en programas de televisión a algún gay simpático, o tengamos un Alcalde gay que se guarda mucho de parecerlo o mostrarlo. Pero esas son excepciones, las cadenas nos sujetan bien aunque nos las difuminen.
 
Desde luego este tema fue algo secundario, anecdótico, pero las anécdotas también aleccionan, de todos modos me guardo para el siguiente post un tema que sí fue central durante la entrevista y del que sí que creo que hay que aclarar algunos términos. ¿Qué es un preso político?
 
Leer en blog El mundo imperfecto

La moneda mentirosa

Luis Salgado – Alternatiba

Dicen que han sacado una nueva moneda conmemorativa, de esas cuyo valor no es “de curso legal”. Una moneda dorada con la efigie de Felipe V de España y VI de Castilla en su anverso y una paloma mensajera en su reverso, pero no matemos al mensajero, la paloma no tiene la culpa, sino quienes han definido el mensaje a entregar. “70 años de paz” gran mentira, mensaje torticero cómo ninguno. Gobierno de España; Reescribiendo la historia desde 1936.

 
Moneda falsa y mentirosa
 
Veamos cómo es posible; dicen 70 años, no 69 ni 71, 70, o sea desde 1945. Por lo cual imaginamos que se han cuidado muy mucho de basarse en aquellas frases y lemas franquistas que se arrogaban la paz desde 1939. Supongo que porque eso sería difícil de justificar. Sobre todo porque en España lo que se vivió fue la paz de las cunetas, de las torturas, de las penas sumarísimas, y eso no es paz. Pero supongamos que ser refieren a la paz cómo a ese momento que discurre entre  dos guerras y no a la existencia de una paz social que en el caso del Reino de España no conocemos en pleno siglo XXI. Si es así, es cierto, en España hay paz desde 1939. Al menos no se ha participado en guerra alguna en territorio hispano desde entonces.

Sin embargo, cómo ya he dicho, la moneda habla de 70 años, desde 1945, por lo que habrá que suponer que se refieren con esa fecha al final de la II Guerra Mundial y por tanto, esa paz entreguerras se refiere a paz Europea. ¡Pero entonces esto también es mentira! ¿Es que el Reino de España no considera Europa Los Balcanes? Ese momento de paz y placidez entre los pueblos Serbio, Croata, Bosnio y Albanes. Y no fue un conflicto breve, 10 años que aún hoy tienen consecuencias. Pero es que aún más, ¿Está en estos momentos Europa en paz? ¿Ucrania es Europa?

¿La Guerra de los Balcanes no se desarrollo en Europa?
 
Con todo esto creo que queda claramente demostrado que el mensaje de la susodicha moneda es una farsa y una mentira. Entonces; ¿Por qué esta mentira tan evidente? Pues por una cuestión muy sencilla, por reconstruir la historia, por dar un nuevo paso en el impulso de la amnesia colectiva, esa que nos haga olvidar 40 años de Dictadura y represión. Porque Europa es la excusa, pero en realidad la moneda es propaganda de consumo interno y no nos engañan. El objetivo es torticero, olvidad, no penséis, nosotros os ponemos el menú. ¡Hortxe duzu fandangua geure gustukoa!
 
Del blog de Luis Salgado, El Mundo Imperfecto
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