Diana Urrea “Immigrazioa eta delinkuentzia lotzea planteamendu xenofobo eta baztertzaileetan erortzea da”
Alternatibako kide eta EHBilduren legebiltzarkide Diana Urreak lehendakariari galdera egiten dio Sestaoko alkateak eginiko adierazpenei buruz. Erantzun txandan Urreak, azken arduradun gisa, lehendakaria euskal gizarte osoaren eskubideak babestera premiatzen du.
Sestaoko alkateak zenbait familiaren erroldatzea galarazi egin du, legez kontra. Alkateak berak, legedia urratzea ontzat jo du argi eta garbi, eta ez du bere jokabidea zuzentzeko asmorik.
Lehendakariak uste du pertsona jakin batzuk euren etnia edo jatorriagatik diskriminatu daitezkeela? eta beraz, legedia urratzen duen alkate bat karguan jarraitzeko moduan dago lehendakariaren iritziz?
Arduradun publikoek eredu izan behar dute elkarbizitza arloan, eta mina eta aurkaritza sortzen dituzten adierazpen eta jarrera guztiak saihestu behar dituzte. Izan ere, argi daukagu helburuak ez dituela inola ere bitartekoak justifikatzen.
Los responsables públicos deben ser ejemplo de convivencia, evitando expresiones y posicionamientos que creen dolor y frentismo. Estamos convencidas y convencidos de que, en ningún caso, el fin justifica los medios.
Estas no son palabras de EHBildu, son las palabras de Caritas Bizkaia, quien en un comunicado en Sestao el 26 de Mayo, apela a las instituciones públicas a garantizar el acceso a los derechos básicos como el empadronamiento necesario para acceder a otros muchos derechos: escolarización de menores, acceso a servicios de atención primaria sociales y sanitarios o el acceso a ayudas de emergencia social.
Porque son varias las familias que han solicitado empadronarse hace meses, incluso más de un año y que de modo ilegal, Josu Bergara, el alcalde de Sestao, les ha negado dicho derecho.
Representantes de SOS Racismo han solicitado reiteradamente una reunión para abordar el incumplimiento, sin éxito alguno. Incluso hay escritos en el propio ayuntamiento por parte de estas familias. La opción que les quedaba era la denuncia.
Por no hablar del Ararteko, que ha intervenido de oficio varias veces en Sestao, la última vez ayer mismo, con requerimientos sobre la situación del empadronamiento de estas personas, así como del proceso de regeneración del municipio, además de cuestiones relacionadas con la seguridad ciudadana.
Este incumplimiento consciente y de modo reiterado de la ley por parte de Bergara, debería haber traído consecuencias políticas, Sr Urkullu, no cree?
Sestao es un ejemplo de lucha popular en medio de una gravísima situación social y económica, lastrado por una tasa de paro del 27%. Resultado de las erróneas y perjudiciales medidas políticas y sociales que en las últimas décadas han desarrollado las diferentes instituciones, convirtiendo a Sestao en un desierto industrial y en referente de precariedad y exclusión social.
Lo que nunca se puede hacer es ligar inmigración con delincuencia de manera generalizada y, mucho menos, caer en planteamientos xenófobos y excluyentes.
¿Creen que solo con más policía en la zona se solucionará el problema de desequilibrio social de Sestao? Sestao y Txabarri necesitan soluciones, medidas y proyectos nuevos, incluyentes e integrales, educación en la convivencia y personas capaces de gestionar los problemas, y sobre todo que sus vecinas y vecinos sean partícipes de ello.
Un claro ejemplo, es el programa que desde los ayuntamientos de Hernani y Astigarraga, se ha puesto en marcha para la inserción de 150 personas de nacionalidad rumana de origen gitano. Considerado por el Ararteko como programa modélico donde por cierto participan la DFG y el Gobierno Vasco.
Esa forma de trabajar da buenos frutos, la que aún ningún alcalde de Sestao ha querido poner en práctica.
Señor Urkullu; es su deber velar porque en las instituciones públicas vascas todas las personas tengan igual acceso a los derechos. Como punto de partida, tomemos el caso de estas familias, comprométase ante los requerimientos de los movimientos sociales, el Ararteko y las formaciones políticas hoy aquí a garantizar el padrón de estas familias.